Los usuarios de las escaleras mecánicas de Tarragona lamentan las frecuentes averías

Las escaleras mecánicas de la calle Vapor traen de cabeza los usuarios habituales, que ven cómo, de manera habitual, alguno de los tres tramos no funcionan. Ayer el fenómeno era evidente en el primero, en sentido ascendente. Las escaleras facilitan la comunicación entre la Parte Baja y el centro de la ciudad, y son muchas las personas que las aprovechan para un desplazamiento más cómodo. Aunque los usuarios agradecen el servicio que dan, también lamentan que, con frecuencia, no funcionan de forma adecuada.

Fulgencio García, persona de edad avanzada, comentó a esta redacción que el citado tramo «hace días que no funciona, no sé si es porque los que hacen el mantenimiento tienen otras cosas que hacer». García afirmó que «utilizo las escaleras habitualmente. Ahora vengo del CAP y, si lo llego a saber, voy por otra calle».

Por su parte, Alberto González, residente en la calle Smith, dijo que «el domingo era el tramo del medio que no funcionaba y, hoy –para lunes–, el primero». «No hay manera que funcionan todos los tramos, como tendría que ser y, a veces, tengo que ayudar a personas mayores». El vecino de la Parte Baja comentó que «hace pocos días tuve que echar una mano a una señora que llevaba un carro».

González se preguntó «de qué sirven las cámaras que hay instaladas» y lamentó que a las 11 horas de la noche dejen de funcionar. Este residente en la calle Smith añadió que «mi mujer ha llamado muchas veces al Ayuntamiento para informar de que las escaleras no iban bien», y reconoció que, «cuando funcionan, van de maravilla, sobre todo para aquellas personas mayores o con problemas de movilidad y que tienen que utilizar muletas». «Las averías son demasiado frecuentes», subrayó González.

Agustín Martín no es un usuario habitual, como sucede en el caso de González, pero incluso se atrevió a dar una estadística. «En mi caso, calculo que un veinte por ciento de las veces que utilizo, las escaleras no funcionan bien». «En muchas ocasiones, están paradas porque trabajan los del mantenimiento», remarcó. Martín aprovechó para señalar que «peor es lo que sucede con las escaleras mecánicas de la plaza de los Carros, que están estropeadas entre un sesenta y un setenta por ciento de las veces que las tengo que usar».

Una mujer se dio cuenta que un tramo de las escaleras no funcionaban. Después de comprobar si el botón de encendido funcionaba, decidió subir el tramo averiado a pie.