Aitor Nieto Pérez: Gerente del café La Cantonada de Tarragona
«No creo que en Tarragona sólo pueda funcionar un sector de la ciudad»
El histórico café La Cantonada de Tarragona ha empezado una nueva etapa con el joven empresario Aitor Nieto al frente
—¿Qué vio en La Cantonada para apostar de una forma tan decidida?
—Es un sitio con mucha historia. Como era de la Cooperativa Obrera, venía con mi abuelo a tomar el café. Siempre me había gustado, y cuando pasé y vi que se traspasaba, pedí información y en una semana ya habíamos cerrado el trato.
—¿Cómo será La Cantonada con Aitor Nieto al frente?
—Tengo muy claro que no quiero que deje de ser un sitio de encuentro para los músicos, la cultura, o cualquier persona que haga arte en la ciudad. Al fin y al cabo todo el mundo acaba aquí, y de aquí salen proyectos de música, de teatro... La Cantonada está en continuo movimiento, igual que el Teatre El Magatzem, que está aquí al lado. En este punto quiero apuntar que el Metropol no es el único teatro de Tarragona, El Magatzem tiene una propuesta muy buena, elaborada por su directora artística, Meritxell Muñoz, con quien somos buenos amigos.
—Cerca de aquí hay también la Sala Zero, donde se programa música en directo. ¿Cree que hay que reivindicar el papel de los ‘pequeños’ como la Zero, el Magatzem o la Cantonada en la oferta lúdica y cultural de la ciudad?
—Sí. Estos locales somos como una pequeña familia, nos conocemos y nos damos apoyo. También el Groove y el Thrash, sitios donde la gente puede ir los fines de semana y hacer una cervecita con los amigos.
—Usted tiene otro local en Tarragona, La Sal, que está en la plaza de la Font. ¿Tenía calibrado el tipo de cliente que hay en esta zona de la ciudad?
—Yo antes ya venía por aquí, a hacer el café y la cerveza, y lo que me he encontrado ya me lo esperaba. Viene gente desde los dieciocho años hasta los cincuenta o sesenta. Lo que sí que se está notando es que, desde que la plaza Corsini está acabada, estamos funcionando un poco mejor. Hay más movimiento, por el propio Mercado como también por los negocios que hay alrededor.
—¿Cree que hay clientes para todos, o que hay que hacer bajar al público de la Parte Alta?
—Yo no creo que en Tarragona sólo pueda funcionar un sector de la ciudad. La Parte Alta va muy bien, sobre todo en verano, pero el centro también tiene su encanto, igual que el barrio del Puerto. Tarragona es una ciudad bonita, con historia, y pienso que habría que potenciar todas las zonas a fin de que cuando lleguen los turistas tengan kilómetros para recorrer, más allá del Anfiteatro, que vean que también hay lugares|sitios donde se hace música, donde salir y divertirse.
—¿Se ven afectados por el cierre de comercios en el centro de la ciudad?
—Desde que he abierto no me he sentido afectado, pero es cierto que sitios como la calle Unió, que hace diez años era de los más transitados, ahora está lleno de locales cerrados o en traspaso, y eso es horroroso, al final nos acabará afectando en todos. Por otra parte, yo pienso que las personas que tenemos negocios tenemos que cuidar mucho a la clientela, porque Tarragona es una ciudad donde todo se sabe, y cuando fallas con alguna cosa enseguida corre, igual que cuando lo aciertas, por eso yo procuro cuidar mucho los pequeños detalles.
—Una de las novedades de La Cantonada es la apuesta por la cocina.
—Sí, quería dar un toque más gastronómico al local. Servimos comida casero con recetas de mi abuela, cocinadas por mi padre, Mario Alberto Nieto. La verdad es que nos está funcionando muy bien.
—¿Qué balance haría de estos primeros meses?
—Estoy muy contento. El día que inauguramos estaba lleno, ya auguraba lo que sería. Los martes hacemos salsa con SalSixto, los miércoles, swing con Swing is in the air, el jueves, English Corner, y viernes y sábado espectáculos en directo. Viene mucha gente, pero porque llevamos espectáculos que valen mucho la pena.
—Una de las novedades de La Cantonada es la apuesta por la cocina.
—Sí, quería dar un toque más gastronómico al local. Servimos una cocina tradicional y moderna, totalmente casera, con recetas de la abuela, que prepara Mario Nieto, y una cocina más moderna, con tapas con toques de fusión asiática con la tapa española de toda la vida, de la mano de Miquel RodríguezLecha, el chef encargado de cocina.