El ICAT propone una vacuna anticonceptiva para que no aumente la población de jabalíes
El Colegio rechaza su captura como solución para reducir su presencia a las zonas urbanas
Los jabalíes vuelven al Parque del Francolí y 'cenan' en la zona de picnic
La Sección de Derecho Animal del Ilustre Colegio de Abogados de Tarragona asegura que la solución para disminuir la población de los jabalíes en entornos urbanos y periurbanos (u otras especies, fruto en muchos casos de los abandonos o tenencias irresponsables) pasa porsistemas alternativos a la captura, tal como demuestran estudios recientes, especialmente los tratamientos contraceptivos.
En este sentido, investigadores del GGrup de Recerca sobre Infertilitat de la Facultat de Veterinària de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) han presentado las primeras observaciones del estudio sobre la efectividad de un tratamiento de immunocontracepció en jabalíes urbanos y periurbanos que han registrado una baja cantidad de progesterona (hormona de la gestación), unos resultados que los examinadores valoran como muy positivos. Además, los estudios sobre la vacuna en jabalíes en cautividad ya concluyeron que la efectividad de este método es del 80%.
Este proyecto de evaluación de la efectividad de una vacuna anticonceptiva para los jabalíes cuenta también con el apoyo de varios colegios de abogados de Cataluña, entre ellos el de Tarragona. La vacuna contraceptiva es, actualmente, uno de los métodos alternativos y éticos de control. Los métodos de esterilización ya se están aplicando con éxito para reducir y controlar otras poblaciones, como la de gatos o palomas.
La Sección de Derecho Animal del ICAT recuerda se tiene que evitar que los jabalíes puedan acceder a los residuos o restos de comer, ya que los índices reproductivos del jabalí se incrementan significativamente cuando hay disponibilidad de alimentos. Por otra parte, estudios llevados a cabo sobre la protección de esta especie a nivel europeo han demostrado que, bajo la presión de la captura, una proporción mayor de hembras de un año dan en luz, una cifra más alta que la que se da en poblaciones en las que la presión de la captura es menos pronunciada.
El ICAT recuerda, además, que la utilización de métodos éticos en este campo es una obligación de las administraciones públicas, según se desprende del Decreto Legislativo 2/2008, por lo que se aprobó el texto de la Ley de protección de animales de Cataluña.