El Ayuntamiento licitará los chiringuitos de la Larga y la Mora, que abrirán el mes de mayo
Habrá una en cada playa y, como pasó el año pasado, sólo se podrán hacer fiestas con música amplificada por Sant Joan, Sant Magí i Santa Tecla
El Ayuntamiento sacará a concurso público, el próximo mes de abril, la concesión de los chiringuitos que se ubicarán en las playas de la Móra y la Llarga –al lado de Cala Romana-. De hecho, el consistorio tan sólo ofrece el espacio, porque la construcción del establecimiento irá a cargo de los empresarios que ganen el concurso. Las licencias de los dos chiringuitos acabaron el año pasado, por este motivo, este año se volverán a licitar. El permiso municipal para hacer uso del espacio será de un año prorrogable a tres más, y no de cinco, como había pasado hasta ahora. El objetivo es que este servicio empiece a funcionar a partir del mes de mayo, un mes antes que el año 2017.
Con la llegada de la primavera, el consistorio empieza a mover hilos para tejer los servicios de las playas tarraconenses de cara a la temporada estival. Los chiringuitos de la Llarga y la Móra volverán a ser objeto de un concurso público, y se sumarán a las que ya existen de manera permanente en la Savinosa –una– y la Arrabassada –tres–, además de la del Miracle, que se sacó a concurso el año pasado y tiene un contrato de cuatro años. Las personas interesadas en la concesión podrán presentar sus ofertas a partir del mes de abril, cuando se abrirá el concurso. Las licencias tendrán una duración de un año más tres prorrogables y, tal como expresaba el concejal de Dominio Público del consistorio, Josep Acero, «los precios irán en la línea de los últimos años».
Las concesiones de estos dos chiringuitos, las únicas que habrá en cada playa, llegan con algunas novedades. En primer lugar, el consistorio tiene previsto que abran el mes de mayo, un mes antes que el año 2017. Hay que recordar que, los fines ahora propietarios de los chiringuitos, criticaron el año pasado la demora en los trámites para poder abrir el establecimiento. Previsiblemente, sin embargo, este año no será así, porque el proceso se ha acelerado desde desde el principio. La segunda novedad llega en términos de condiciones: el chiringuito tendrá que ser de nueva construcción, si los concesionarios no pueden acreditar que los materiales para hacerla se compraron después de enero de 2013. Si el empresario no lo puede demostrar o se trata de una persona que gana el concurso por primera vez, el consistorio obligará a hacer una obra nueva. De esta manera, el Ayuntamiento se asegura que «los materiales no son excesivamente antiguos y están en buen estado», según expresaban desde Dominio Público.
Tres fiestas en todo el verano
Tal como pasó el año pasado, los chiringuitos de la playa sólo podrán poner música ambiental o dar conciertos de pequeño formato sin amplificación. «Hay que preservar la convivencia con los vecinos», manifestaban desde la concejalía. El año pasado, esta medida levantó polvareda, sobre todo al chiringuito de la Llarga, ubicada junto a Cala Romana. Así pues, las fiestas con música amplificada, como los tradicionales vermúes electrónicos, sólo podrán celebrarse en tres fechas muy concretas: Sant Joan, Sant Magí i Santa Tecla.
Sobre la polémica generada el año pasado, el concejal Acero subrayaba que «son más fiestas de las que se podrían hacer antes», y recordaba la primera normativa, que prohibía las fiestas durante todo el verano. Además, añadía: «El año pasado nadie nos pidió permiso para hacer ningún acontecimiento en estas tres fechas».
La documentación del concurso público que ofertará los chiringuitos está pendiente de fiscalización. Después, la Generalitat tendrá que aprobar los usos que el consistorio dará en las playas. Una vez se hayan hecho estos trámites, dentro de dos o tres semanas, los interesados podrán empezar a presentar sus ofertas. «Algunas personas ya nos han enviado, verbalmente, su interés», expresaba Acero.
Tumbonas y toldos
Aparte de los chiringuitos de playa, el consistorio también ofrecerá la concesión de espacios para dar el servicio de tumbonas y toldos. Se trata de una opción que el Ayuntamiento ya sacó a concurso el año pasado, pero quedó desierta en todas las playas. Así pues, para este 2018, el consistorio espera recibir ofertas.
Los espacios a escoger serán un servicio de tumbonas y toldos en las playas de la Móra, la Arrabassada y la Llarga y otro de patines y similares en la Savinosa y en el Miracle. Estos, se unirán, en caso de recibir ofertas, a los ya existentes. Repetirá, por ejemplo, la banana de la Llarga y Tamarit o el servicio de taquillas estrenado, el año 2017, en la Arrabassada.
El temporal se come la arena de las playas en el Miracle y en la Llarga
Cuando faltan cerca de tres meses para que empiece la temporada estival, las playas tarraconenses presentan una estampa preocupante. Después del temporal de lluvia y viento vivido las últimas semanas, son muchos los puntos de las playas donde la arena casi ha desaparecido. Tal como ha comprobado este medio in situ, en la playa del Miracle, la parte central se ha quedado sin espacio para acoger a los bañistas. El mal mar de los últimos días ha hecho desaparecer la arena y el agua llega a las rocas que delimitan el espacio con el paseo marítimo. La situación se repite en la playa Llarga. Allí, desde la parte central hasta la zona de los campings, la arena se va reduciendo hasta el punto que el agua casi acaricia las cuerdas que marcan el inicio de las dunas. Otro temporal durante la primavera podría acabar de empeorar una situación que también se repite en otros puntos de la demarcación y también de la costa catalana. Habrá que esperar para saber si desde las administraciones creen necesario un movimiento de arena para mejorar el estado.