Las obras de reforma del MNAT empiezan la próxima semana

El Museo Nacional Arqueológico de Tarragona (MNAT) empieza la próxima semana la primera fase de los trabajos de acondicionamiento y modernización de las instalaciones museísticas de su sede central en la plaza del Rei de la ciudad. Antes del cierre, el próximo lunes, el Museo organiza durante este fin de semana 14 y 15 de abril jornadas de puertas abiertas para que todo el mundo que lo desee pueda visitar las actuales instalaciones antes del inicio de las obras de renovación.

El proyecto de reforma del MNAT prevé tres fases a cuatro años. La primera fase, que se inicia ahora y durará hasta el 2020, contempla las obras de acondicionamiento arquitectónico y climatización a cargo del Ministerio de Educación, Cultura y Deportas (4.023.000 €), titular del equipamiento, y el traslado y restauración de las piezas expuestas, a cargo de la Generalitat de Catalunya (210.000 €), encargada de la gestión del Museo. El proyecto arquitectónico ha sido redactado por los arquitectos Miquel Orellana y Rubén Las Heras e intervendrá para dar solución a la actual precariedad en que se encuentran las instalaciones y mejorar los aspectos de conservación preventiva, accesibilidad y confort para los visitantes.

Antes sin embargo, se iniciará el proceso de traslado de las colecciones, la mayor parte de las cuales será trasladada temporalmente a los almacenes del MNAT para su conservación y restauración, mientras una excepcional selección de piezas, especialmente representativa de las colecciones se expondrá en el Tinglado 4, en el Moll de Costa del Port de Tarragona. Durante el cierre del edificio de la plaza del Rei, el MNAT se traslada en las instalaciones del Port para seguir funcionando y dar servicio a los visitantes y, en especial, a los escolares.

Bajo el nombre de Tàrraco/MNAT , la exposición de la T4 del Port presentará una síntesis de la historia de Tàrraco con una selección excepcional y representativa de las colecciones museísticas. Algunas de estas piezas como las provenientes del Teatro romano (dos estatuas de togados y un acorazado) o las colecciones de bronce se están restaurando actualmente en el Centro de Restauración de Bienes Muebles de Cataluña para su exposición, que se inaugurará el próximo 16 de junio con motivo de la celebración de los XVIII Juegos Mediterráneos que tendrán lugar en la ciudad y otros suyos del territorio, del 22 de junio al 1 de julio del 2018.

Una vez finalizadas las obras de acondicionamiento, en el 2020, se iniciará la segunda fase del proyecto de reforma del MNAT que afecta a la museografía. El proyecto museográfico, que se acaba de redactar actualmente, y su instalación, van a cargo del Departamento de Cultura de la Generalitat y suponen una inversión aproximada de 1.100.000 €. La nueva exposición permanente abrirá al público en el 2021 con un nuevo discurso renovado y actual y una museografía moderna y experiencial.

Finalmente, la tercera fase concertará un itinerario conceptual y museográfico que unirá el MNAT con el Pretorio y las bóvedas del Circo. Un proyecto conjunto con el Museo de Historia de la Ciudad del Ayuntamiento de Tarragona que tiene la voluntad de hacer de este polo patrimonial, el epicentro del conocimiento del pasado romano de Tàrraco y de la romanidad en Cataluña.

La reforma del Museo se enmarca en el proyecto común de la Generalitat de Catalunya y el Ayuntamiento de Tarragona de puesta en valor del patrimonio romano de la ciudad iniciado en el 2015 en aplicación del Plan de Gestión del Patrimonio Mundial de Tàrraco. El objetivo principal es hacer de Tarragona una ciudad de referencia en materia de protección, conservación y difusión del patrimonio cultural. Un marco operativo y de gestión basado en la cooperación entre todos los agentes implicados en el patrimonio de Tarragona que engloba otras actuaciones como|cómo las que se están llevando a cabo en el Teatro romano, las Murallas, el Circo y la Part Alta (centro histórico) de la ciudad así como la villa romana imperial de los Munts en Altafulla.

El Museo Nacional Arqueológico de Tarragona

Nacido como museo provincial, el Museo Nacional Arqueológico de Tarragona es el más antiguo de Cataluña en su especialidad. Se formó durante la primera mitad del siglo XIX, a partir de colecciones de los siglos XVI, XVII y XVIII, aunque la mayor parte de los fondos han sido recuperados en los últimos ciento cincuenta años como consecuencia de la construcción del puerto moderno, del extraordinario crecimiento urbanístico de la ciudad y de su entorno.

Después de diferentes ubicaciones y periodos más o menos activos entre los cuales hay algunos de cierre, el Museo se consolidó definitivamente y permaneció en el edificio de la plaza de la Fuente más de cien años. En 1960 se trasladó al edificio que ocupa actualmente en la plaza del Rey, instruido de nueva planta como museo, con la particularidad que en el subsuelo se conserva un fragmento del lienzo de la muralla. El año 1982 su gestión fue transferida a la Generalitat de Catalunya. Desde el 2014, el Museo y sus sedes son gestionados por la Agencia Catalana del Patrimonio Cultural.

El Museo Arqueológico destaca por su colección de época romana, especialmente de la Tàrraco del siglo II aC hasta la tardorromanitat. Conformada desde el siglo XVIII a partir de iniciativas privadas y a partir de 1845 en tanto que institución pública, la colección del MNAT recoge, entre otros, la impresionante estatuaria del Teatro romano, los restos arquitectónicos del templo de Augusto y del foro provincial, una amplia muestra de los pedestales y estatuas que decoraban los espacios públicos de la capital de Hispania conformando la más excepcional colección epigráfica de la península, así como una diversa muestra de objetos de la vida cotidiana de sus habitantes, desde los esclavos hasta los representantes de la familia imperial.

De entre los objetos de la colección podemos destacar los mosaicos de la Medusa y de los Peces (este último de la villa de Cal·lípolis de Vila-seca), la colección de pinturas de una domus de Tàrraco, la Nina d'Ivori encontrada en la Necrópolis Paleocristiana, o la escultura de Antinuevos, que forma parte de la majestuosa decoración de la Vil·la dels Munts de Altafulla.