Las obras de la nueva escuela Arrabassada arrancan en menos de treinta días

Las obras de la nueva escuela del Arrebatamiento, que se ubicará en la calle Mercè Rodoreda y tendría que haber empezado a construirse en diciembre, arrancarán en quince o veinte días. El Ayuntamiento de Tarragona y la Generalitat de Cataluña han asegurado hoy que la situación del nuevo equipamiento educativo se ha desbloqueado y que, por lo tanto, «ya no hay ningún obstáculo», según el alcalde de la ciudad, Josep Fèlix Ballesteros. La comunidad educativa de la Arrabassada hace más de una década que da clases en barracones, por lo tanto, la construcción del nuevo centro supone un gran avance y una noticia inmejorable para padres, madres, profesores y alumnos. Las obras tienen un periodo de ejecución de 22 meses, así pues, el edificio podría estar terminado para acoger el curso escolar 2020-2021.

El Departament d'Ensenyament destinará a las obras de la nueva escuela un total de 4.534.354 euros. La escuela dispondrá de seis aulas de educación infantil y doce de primaria, además de aula de psicomotricidad, biblioteca, tutoría y almacén, aulas de desdoblamiento, aulas de informática y otros de específicas. También dispondrá de gimnasio y vestuarios, comedor y cocina, así como diferentes espacios de uso administrativo –despachos, sala de profesores, AMPA. El centro educativo tendrá en total una superficie construida de 3.690,50 metros cuadrados.

Desde el AMPA del colegio aseguran estar «muy contentos» por el anuncio de inicio de las obras. «Creíamos que no llegaría nunca y necesitamos el nuevo edificio para hacer el trabajo en condiciones», ha dicho la presidenta de la asociación, Arianna Ciurana.

Las obras de la escuela Arrabassada tendrían que haber empezado el mes de diciembre, después de que la actuación se licitara desde el portal de Infraestructuras de la Generalitat en octubre. Una misiva de las Dominiques a esta institución, pero bloqueó la situación. El año 2014, la Generalitat aceptó la cesión de unos terrenos municipales ubicados en el Vall de la Arrabassada para construir la escuela pública. Era el mismo solar que el Ayuntamiento había prometido a Dominiques el año 2005 a través de un convenio. Por eso, la Congregación envió una carta a la Generalitat donde reclamaba la vigencia de lo mismo.

Las discrepancias jurídicas entre el consistorio tarraconense y la Congregación sobre la validez del documento provocaron que la Generalitat, por miedo a un paro de las obras una vez iniciadas, no diera la orden de empezar a construir el centro. Después de unos meses de reuniones a cuatro bandas, sin embargo, la situación se ha acabado desbloqueando. Tal como adelantaba Diari Més la semana pasada, las Dominiques se han comprometido a no interferir en este caso. O dicho de otra manera, a no reclamar jurídicamente la vigencia del acuerdo del año 2005 y la propiedad del solar.

Acuerdo con Dominiques

Las conversaciones entre el Ayuntamiento y las Dominicas para encontrar una nueva futura ubicación de la escuela, a estas alturas en la calle Rovira i Virgili, son un hecho. Sin embargo, Josep Fèlix Ballesteros, no ha querido dar hoy ningún detalle sobre este acuerdo. Desde las Dominiques, informaban a este medio hace algunos días de que «hoy por hoy, no nos moveremos de sitio». El objetivo de la Congregación es encontrar un futuro emplazamiento que permita crecer a la comunidad educativa. Esta idea, sin embargo, se empezaría a llevar a cabo a cuatro o cinco años vista. «De momento, nos quedaremos donde estamos», recalcaban desde la Congregación.