El pleno de Tarragona rechaza dos mociones para la liberación de los «presos políticos»

El pleno del Ayuntamiento de Tarragona ha rechazado en el plenario de este viernes dos mociones para la liberación de los «presos políticos». El debate ha sido marcado por los reproches y por los encontronazos en el posicionamiento político de las diferentes formaciones, y ninguno de los dos textos ha recibido el apoyo necesario para poder ser aprobado. La primera moción lo ha presentado los grupos de Unidos e ICV-EUiA, y posicionaba «contra el encarcelamiento de los representantes políticos y de los dirigentes independentistas» y pretendía instar a superar «el bloqueo institucional». El segundo texto, consensuado por ERC, el PDeCAT y la CUP, era partidario de «la liberación de los presos políticos, el retorno de los exiliados y la denuncia de la deriva antidemocrática y autoritaria del estado español».

La moción de postín e ICV-EUiA se mostraba en desacuerdo con el proceso judicial, con los encarcelamientos y con el procesamiento por rebelión, si bien criticaba «la unilateralidad y el cúmulo de errores en la estrategia llevada a cabo dentro y fuera del Parlament que culminó en la proclamación simbólica y desafortunada de la independencia». La portavoz ecosocialista, Arga Sentís, ha defendido que era una moción «de mínimos» con la voluntad de «desescalar» la situación y encontrar salidas al conflicto político.

A pesar de estas intenciones, la CUP lo ha rechazado porque considera que los pueblos tienen derecho a la autodeterminación. Desde de ERC se han mostrado «decepcionados» por el texto, han rechazado las críticas a los procedimientos llevados a cabo en el Parlament y han acusado a los ponentes de «cínicos». C's, el PP y la concejala no adscrita también se han opuesto a la moción, mientras el PDeCAT se ha abstenido y el PSC ha votado a favor.

Desde C's han rechazado la idea de que haya «bandos» y han defendido que «no se juzgan ideas, sino actos». El concejal del PP Josep Acero ha compartido el posicionamiento del partido naranja y ha admitido que, si bien «no ha habido violencia», la «presión psicológica es brutal». La portavoz socialista, Begoña Floria, ha lamentado que la situación continúe «enrocada» y ha pedido que se eviten él lenguaje ofensivo y los ataques personales directos.

La segunda moción, presentada por ERC, el PDeCAT y la CUP tampoco se ha aprobado. En este caso, el texto pide la liberación de los «presos políticos» e incluía un apoyo explícito a los CDR «a raíz de las razzias represivas del Estado». La moción, sin embargo, ha recibido los votos contrarios del PSC, PP, Cs y de la concejala no adscrita, y la abstención de postín e ICV-EUiA.

Las formaciones no soberanistas han coincidido en exigir a los independentistas que invistan a un presidente de la Generalitat para poder formar Gobierno. Desde Cs también han insistido en que no hay «presos políticos», sino «políticos en la prisión», y han rechazado que a los dirigentes independentistas se los pueda considerar «exiliados». El alcalde de Tarragona, Josep Fèlix Ballesteros, ha apelado a «luchar hasta allí donde haga falta para tener puentes para rebajar la tensión» y a ofrecer «mano tendida».

Respondiendo a una pregunta de la concejala de la CUP Laia Estrada, Ballesteros ha avanzado que no colgarán ninguna pancarta por «la libertad de los presos políticos» en la fachada del Ayuntamiento porque este tipo de acciones, ha dicho el alcalde, sólo se hacen «si son institucionales o aprobadas por unanimidad».

Otros acuerdos

Durante el pleno, se ha aprobado provisionalmente una modificación del POUM respecto del proyecto de Mas d'en Sorder, junto al golf del Catllar. En este ámbito, de unas 47 hectáreas, está previsto que se construyan más de 200 viviendas y un hotel.

Asimismo, durante el pleno se ha dado a conocer que el consistorio «rehabilitará» un agente de la Guardia Urbana que había sido sancionado por haber robado diez euros. El gobierno ha declinado dar más detalles porque el caso supuso la apertura de un expediente protegido.

Por otra parte, el plenario ha aprobado, mediante declaraciones institucionales, la instalación de placas Stolperseteine en recuerdo a los deportados en los campos de concentración nazis; el apoyo del consistorio en que la festividad de Sant Jordi sea declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad; el apoyo a la ONG catalana Proactiva Open Arms y la ratificación del convenio 189 de l'OIT sobre las personas trabajadoras del hogar.

El pleno ha aprobado mociones para implementar una policía de barrio y una red de agentes cívicos de proximidad para prevenir el incivismo, así como en apoyo al Año Europeo del Patrimonio Cultural 2018 y para que Tarragona participe en las actividades de celebración de esta programación. Por unanimidad, el pleno también ha dado luz verde a una moción para solucionar los problemas de seguridad de la movilidad en las escuelas y en otra que se propone proteger, conservar y favorecer la proliferación de las abejas en Tarragona.

Cierre de viales en el polígono de la Floresta para evitar el vertido ilegal de desperdicios

En el turno de preguntas, Ciutadans ha interpelado al gobierno por las actuaciones para evitar los vertidos ilegales de desperdicios en el polígono situado entre la zona comercial de las Gavarres y el barrio de la Floresta. El alcalde, Josep Fèlix Ballesteros, ha adelantado que es posible que procedan a cerrar algunos viales del polígono «porque no paran de detenerse coches» para verter residuos. Según el alcalde, en los últimos meses se ha hecho hasta cinco actuaciones de limpieza por la reiteración de las actitudes incívicas.

A raíz de una pregunta del PDeCAT sobre el auditorio del Camp de Mart, la concejala Begoña Floria ha señalado que, según los técnicos, «la cubierta mostraba un buen estado de conservación» y ningún signo aparente de «peligro inminente». El exconcejal de Cultura Josep Maria Prats, dimitido a raíz del 1-O, cerró el recinto y ahora la concejala Floria ha anunciado que se reabrirá en breve ante la falta de informes contrarios.