Las figuras del carillón del Mercat Central, en proceso de construcción

Las figuras que formarán parte del carillón del Mercat Central ya se encuentran en proceso de construcción. El artista Joan Serramià hace días que trabaja en su taller, ubicado cerca de Constantí, en la creación del Àliga, el Lleó, la Negrita, al Gegant Moro, la Geganta Vella y el Nano Capità. La elaboración de los elementos se divide en tres fases. En primer lugar, Serramià modela las figuras con barro. Después, crea los moldes de las mismas, que se llenarán de fibra de vidrio. Una vez estén terminadas con el material adecuado para que soporten el paso del tiempo y las inclemencias del tiempo, las retocará, las pintará y se pondrá en contacto con la empresa encargada del mecanismo del reloj.

Serramià ha sido el artista escogido por el Ayuntamiento de Tarragona para elaborar las figuras del carillóndel Mercat Central, que se estrenará por Santa Tecla. A estas alturas, ya tiene preparados los moldes del Àliga y el Lleó. Justo en medio del taller, luce la cabeza del Nano Capità, que se encuentra en el proceso de modelado. «Primero le doy forma con barro, después hago el molde con escayola y con silicona para los detalles y, después, los llenaré con fibra de vidrio», detallaba el artista.

Su experiencia con los elementos del Seguici Popular es dilatada. Con 14 años, ya construía las primeras recreaciones. «Son como de la familia», bromeaba Serramià mientras retocaba las arrugas del Nano Capità. Sin embargo, crear las figuras del carillónrequiere de atención especial. «Tengo que acentuar los detalles y simplificarlos para que destaquen, porque las figuras se verán desde lejos,» apuntaba Serramià. A modo de ejemplo, la nariz del Nano será mayor del habitual.

Los últimos pasos

Una vez haya terminado los moldes del Nano, que se unirán a los del Àliga y el Lleó, Serramià empezará a modelar las figuras de los tres gigantes. Serán las más altas y llegarán al metro de altura. El motivo, respetar las proporciones con los otros elementos del Seguici. «Las proporciones son el más difícil junto con el modelado, que es la parte más delicada de todas», explicaba el artista. Una vez esté todo acabado, Serramià pintará las figuras con pintura en el aceite. Por lo tanto, no habrá ninguna pieza textil. Con el fin de acercarse al máximo a la realidad, el Lleó y el Àliga contarán con una capa de bronce para el primero y de latón para la segunda.

Las figuras se ubicarán en una pequeña habitación situada detrás del reloj del Mercat, en el interior de la fachada. Allí estarán protegidas del viento y la lluvia, pero aun así, el artista adelantaba que hará falta una restauración cada 10 o 15 años. «Aunque habrá que ver cómo soportan el paso del tiempo», añadía. El carillón será una realidad por las fiestas de Santa Tecla.