Unos 80 niños que han hecho la primera comunión participan en la procesión de Corpus
El Seguici, encabezado por Magí de les Timbales, hizo el nuevo recorrido profesional, en torno a la Catedral, en menos de una hora
La professó de Corpus estrenó ayer nuevo recorrido, abandonando su pase por calles como Mayor y Santa Anna y plazas como la del Rey, para dar la vuelta al completo en el recinto catedralicio. La solemnidad que la presidió fue, un año más, uno de los elementos más significativos.
Centenares de personas se congregaron en el Pla de la Seu, las Cocas, Sant Pau, Pla de Palau, Virgen del Claustro y Escribanías Viejas para presenciar el recorrido de la comitiva religiosa, acompañada de los elementos festivos tradicional que participan, como Magí de les Timbales, los Negritos, los Gigantes Moros y los Gigantes del Cos del Bou. Los grupos de gralleros Quatre Garrofers, el Espiridió y Sonogralla pusieron la música.
La celebración del Corpus en Tarragona se inició a las 9 de la mañana, cuando en la fuente del Claustro de la Catedral se puso en marcha el Huevo como Baila, actividad que fue visitada por centenares de personas, tanto de la ciudad como venidas de otras regiones y turistas.
La jornada continuó con el toque de campanas, que a partir de las 17 horas anunciaron la entrada pontifical en la Catedral, donde una hora después se inició el oficio religioso. A las 18.45 horas tuvo lugar la plantación de los elementos del Séquito de Corpus en el Pla de la Seu y, poco después de las 19.20 horas dio inicio la procesión.
La comitiva subió por las Cocas en dirección al Plan|Plano de Palau, encabezada por Magí de les Timbales y de los otros componentes del Séquito de Corpus. A sus espaldas, los abanderados de las cofradías de Semana Santa, unos ochenta de niños que han hecho su primera comunión y los abanderados de la Adoración Nocturna.
Con el repique constante de las campanas de la Catedral, la comitiva continuó con el Corpus, el arzobispo Jaume Pujol y miembros del capítulo. La cerró una representación del consistorio tarraconense, encabezada por el alcalde de Tarragona, a Josep Fèlix Ballesteros. El nuevo recorrido hizo que, cuando los últimos componentes de la comitiva partieron del Pla de la Seu, Magí de les Timbales y los gigantes ya se encontraban en el Pla de Palau, después de haber hecho casi tres cuartas partes del recorrido. El nuevo recorrido hizo que la professó de Corpus de este año tuviera una duración de menos de una hora.
Si por la mañana la lluvia hizo acto de presencia, por la tarde el sol se combinó con nubes primaverales que no soltaron ninguna gota de agua, lo cual contribuyó al hecho de que la professó transcurriera sin ningún tipo de incidente.
El Claustro de la Catedral se llena para ver el Huevo como Baila
El Claustro de la Catedral recibió la visita de centenares de personas para vivir en directo la tradición del Huevo como Baila. A pesar de la lluvia, los tarraconenses y personas que se encontraban de visita a la ciudad no desconfiaron al acceder al punto central del Claustro para ver el movimiento del huevo encima del chorro de agua, mientras se agotaban las quinientas cocas de cerezas que, desde hace más de veinte años, venden a Teresa, Nuri y Montse, ayudadas para|por otras amigas.
Rosa Pascual, una granadina que fue a recorrer la Catedral, se encontró con una sorpresa desconocida: el Huevo como Baila. «No sabía que se hacía y me ha sorprendido». Pascual añadió que «me he informado y me han dicho que el huevo está vacío para que pueda rodar». Fran Otero, un canario que hace poco se mudó a Barcelona por trabajo, comentó que «sabía que se hacía, pero no lo había visto nunca y la historia de esta tradición es curiosa». Otero y su pareja no dejaron pasar la ocasión de comprar la coca de cerezas. «Me han dicho que es una tradición de estos días y la probaremos», dijeron.
Entre las personas que se congregaron en el Claustro al mediodía se encontraba el exjugador del Nàstic Romà Cunillera, quién, sin duda, estaba contento por la victoria de los grana ante el Rayo Vallecano y que supuso la permanencia del equipo en Segunda A, aunque remarcó que «no hemos hecho un buen fútbol». Cunillera dijo que casi todos los domingos «venimos a la Catedral a ver al Señor». Amante de las cocas de cereza, comentó que «es la primera vez que la compro aquí, pero acostumbro a hacerlo en una panadería de la plaza Ponent, donde la hacen muy buena». También visitó el Claustro a una persona que lleva el nombre de la patrona de la ciudad. «La abuela, la madre, yo y una nieta nos llamamos Tecla». «He venido a dar una vuelta y ver el Huevo como Baila», dijo.