Un pequeño 'tsunami' llena de barro el embarcadero del remo del Náutico
La ausencia de calado por falta de agua obliga a suspender la preparación de los campeonatos de España de los sénior y veteranos
Sólo falta la firma de la Agencia Catalana del Agua (ACA) para que la Autoridad Portuaria pueda cumplir un viejo sueño de la sección de remo del Club Náutico, como es dragar el cauce del río Francolí, donde entrenan los remeros siempre que les es posible y no sucedan fenómenos meteorológicos como el de ayer, donde el agua se retiró de manera repentina del tramo de la desembocadura y volvió en forma de ola que arrastró barro hasta muchos metros adentro.
El poco calado de la zona de entrenamiento, la acumulación de lodos y todo tipo de desperdicios, y el caudal de agua hace que, de manera reiterada, los remeros tengan que suspender o modificar su preparación. Eso es lo que pasó ayer con los representantes del Club Náutico que dentro de dos semanas tienen que disputar los campeonatos de España de las categorías Sénior y Veteranos. No pudieron dejar las embarcaciones en el agua por falta de calado, informó el club.
El delegado de la sección de remo, Víctor Cremades, manifestó en esta redacción que, fenómenos como el de ayer por la mañana, «se producen cuando baja la presión atmosférica, hecho que cada vez se nota más por la acumulación de barro.» El agua del tramo final del Francolí, donde se juntan el río y el mar, se retiró y unos minutos después todo el ancho del cauce se cubrió de un agua negra y fangosa. «Normalmente, el agua puede bajar unos veinte centímetros», los suficientes para que las embarcaciones tengan que quedarse a tierra», dijo Cremades. Además de no poder entrenar, la acumulación de barro y de otros desperdicios provoca un fuerte olor desagradable que no invita a ejercitarse en las mejores condiciones para deportistas de élite.
Proyecto para dragar
A inicios del pasado mes de febrero Diari Més informó de las dificultades que tienen a los remeros del Náutico para entrenar a causa del poco calado que, a veces, es inexistente. Por aquellas fechas, la Autoridad Portuaria anunció que ya disponía del proyecto y de los recursos económicos para proceder al dragado del tramo final del cauce del río, pero que hacía falta la autorización del departamento de Medio Ambiente de la Generalitat para poder ejecutarlo.
Cremades remarcó que «el Puerto tiene presupuestado el dragado, pero le falta el permiso del ACA». «Sólo falta una firma para que puedan iniciarse las obras», subrayó. El delegado de remo del club tarraconense no descarta tomar algún tipo de medida para conseguir que el ACA dé la autorización, si es necesario, para que el proyecto no pueda ser una realidad. Las mareas y la acumulación de lodos son dos aspectos que imposibilitan los remeros del Náutico entrenar en buenas condiciones, como estos días los pasa a los equipos formados por sénior y veteranos.
Alejandro Demiddi, entrenador de la sección desde el año 2005 y de la selección española juvenil, ya manifestó el pasado febrero que «es urgente el dragado del río, porque|para que cuando la marea baja no podemos entrenar y los lodos llegan hasta el embarcadero». «En más –añadió– corremos el riesgo de que se rompan los botes|odres, que están valorados entre 5.000 y 7.000 euros, a causa de la poca profundidad –a veces medio metro– que hay muchos días, en los cuales no pueden salir a entrenar». Demiddi reiteró que los remeros que entrenan en el tramo final del río se encuentran todo tipo de objetos que pueden estropear las embarcaciones, incluso «partirlas de una vez porque son muy frágiles», como pueden ser carros de supermercado que a la gente tendel en el río y el agua les arrastra.