Jessica Vall, la 'recordwoman' en Tarragona

No diga récord, diga Jessica Vall. La barcelonesa repetía ayer en los Juegos Mediterráneos 2018. Se hacía suya la piscina y volvía a colgarse el metal más preciado, convirtiéndose en la primera española a hacerlo en todo lo que va de Juegos Mediterráneos Tarragona 2018. Los 100 metros braza eran, esta vez, la prueba donde, aparte del oro, Vall conseguía el récord de los Juegos Mediterráneos. Dos oros y dos récords. ¿Qué más se puede pedir para una joven que, a sus 29 años, maravillaba en su casa?

1'07''19 que se convertía en todo un récord, pero no muy lejos de los 1'07''50 que alcanzaba Marina Garcia. Por cierto, una Marina Garcia que emulaba en Valle, pero en plata. Dos medallas para la joven que, a sus 24 años, cuenta con un gran futuro por anticipado.

Muy contenta por los resultados alcanzados, Vall manifestó que «las cosas están saliendo bien, pero hay un trabajo detrás», haciendo referencia a un consejo que le llega desde la familia. «Mis padres dicen siempre que se tiene que ser optimista delante de todo», aunque reconoció que «hay días en los cuales no es sencillo poder hacerlo».

Vall se mostró muy exigente con ella misma. Dos oros parecen no ser suficientes para una nadadora que argumentó que «el hecho de no haber descansado y no estar en un nivel óptimo de forma implica que cuesten los primeros parciales». Ahora bien, Vall siempre acaba remontando y, de momento, ha demostrado que no hay nadie mejor que ella. Ahora bien, tuvo palabras para una nadadora que casi estuvo a punto de cogerle el oro, una Marina Garcia a la cual aseguraba y le agradecía «tener esta rivalidad, ya que eso nos sacó lo mejor de nosotros y nos ayuda a entrenar cada día más llevar para poder continuar al máximo nivel».

Joan Pons, plata

Empezaba la tarde con una gran alegría, una alegría plateada. Joan Pons alcanzaba la medalla de plata en los 400 estilos masculinos, en la primera de las múltiples pruebas que volvía a acoger una piscina olímpica que, nuevamente, no decepcionaba. Ni con respecto a público, ni en lo que hace referencia al nivel de las competiciones. La espectacularidad de los 400 estilos motiva que nadie tenga la tentación de levantarse de la silla, porque cada una de las tipologías de natación motivan que se puedan producir cambios constantes. Pones sólo ha sido superado por el italiano Federico Turrini y por el portugués Alexandre Vital. Belmonte se redimía con una medalla de plata en la segunda carrera de la tarde, la cual, sin embargo, no sería la última para España. Nuevamente, de hecho, España e Italia fueron las protagonistas de la tercera jornada de los Juegos Mediterráneos, la segunda de competición con finales incluidas en la piscina olímpica.

Otra de las estrellas de la jornada fue Melani Costa. La de Palma de Mallorca a punto estuvo llevarse el máximo reconocimiento a la prueba de los 200 metros libres. Por|Para centésimas, concretamente 63, tuvo que conformarse con una plata, por detrás de la francesa Marie Wettel y superando en Linda Caponi, a la italiana, que fue tercera.

Bronce en los relevos

Más de una hora sin ver a ningún medallista español, pero el combinado español todavía tenía cosas que decir. Como la de la medalla de bronce en la prueba de los 4x100 metros libres en categoría femenina. Gran carrera, en la cual Italia reinó de principio a fin y el combinado español perdió en el roce con Francia. O también, como otro bronce, el del 4x200 masculino, lo que ponía punto final a la competición en la piscina en el segundo día de competición de los tres que están previstos.