Unos 300 abuelos se concentran en respuesta a la pitada a Torra a los Juegos y por la libertad de los políticos encarcelados

Unos 300 abuelos venidos de todo el Camp de Tarragona se han concentrado este martes en el Balcó del Mediterrani en respuesta a la pitada que el presidente de la Generalitat, Quim Torra, recibió en la inauguración de los Juegos Mediterráneos. En la protesta, en la que han participado manifestantes de Reus, Vila-seca, la Canonja, Cambrils o Mont-roig, entre otros, se ha reclamado la libertad de los políticos independentistas presos. Lluís Jové, portavoz de los convocantes del encuentro, Tercera Juventut per la República, ha afirmado que no podían permitir que «en nuestra casa se silbe nuestro presidente», además de mostrar el rechazo por la imagen de graderías vacías o las acusaciones de haber repartido entradas a entidades como Vox o Sociedad Civil Catalana, o el contenido de la ceremonia, dónde no consideran que se haya reflejado la cultura tarraconense.

Gorras de color amarillo, camisetas amarillas y pancartas donde se pregunta si es ilegal votar. Con todo este material, decenas de abuelos venidos de todas las comarcas tarraconenses han expresado su malestar por la pitada a Torra el viernes, en la inauguración de los Juegos Mediterráneos. Articulados en varias entidades, han reclamado la puesta en libertad de los políticos independentistas presos como punto previo antes de ninguna negociación. «No pararemos ni un solo día hasta que no conseguimos que liberen a los presos», han afirmado. Los abuelos se han emplazado a participar en los encuentros, que se harán a partir de ahora en la plaza de la Font, y no descartan sumarse a posibles convocatorias de cara la clausura de los Juegos, el domingo por la noche.

El llamamiento responde a una serie de actos de los colectivos de abuelos, encabezados por los Avis per la Llibertat de Reus, uno de los primeros grupos que salió y de los más multitudinarios. Los convocantes, Tercera Juventut per la República, empezaron actos en junio con la intención de que las personas mayores «no se queden en casa». «Somos gente que hemos vivido el final de la guerra y una dictadura, y pensábamos que eso se había acabado, y ahora vemos que se están recortando libertades y eso no se puede comportar», ha asegurado el portavoz.

Al acto han participado la ANC y Òmnium, además del concejal de ERC Pau Ricomà y del PDeCAT Dídac Nadal. En la concentración se ha hecho la lectura de un manifiesto, en el que se ha recordado a los presos independentistas y sus familiares, se ha cantado L'Estaca i Els Segadores . Los manifestantes han reclamado la dimisión del alcalde, Josep Fèlix Ballesteros, y han pedido que no retroceda «ni un paso».