Dominio Público
Cuatro quioscos en estado de abandono serán derribados a inicios de agosto
Localizados en Rambla Nueva, Cronista Sessé y Marqués de Montoliu, hace años que están cerrados
Cuatro quioscos de venta de productos de prensa, mayoritariamente, que de hace años presentan un lamentable estado de conservación, pasarán a mejor vida a inicios del mes de agosto, con lo cual la vía pública donde están enclavados ganará un espacio para los peatones: Rambla Nueva, Cronista Sessé y Marqués de Montoliu. El último intento del Ayuntamiento de reabrirlos fue el 2014, pero ninguna persona o empresa se interesó por el concurso público en que se llevó a cabo.
El concejal de Ocupación del Dominio Público, Josep Acero ha manifestado en esta redacción que la demolición de los puntos de venta citados se iniciará, como a muy tarde, «la primera semana de agosto». Acero, apuntó que «ya he firmado la orden para iniciar las tareas para desmontar los cuatro quioscos».
La intención inicial del Ayuntamiento era proceder al derribo a finales del año pasado o primeras semanas del pasado mes de enero, pero no ha sido posible a causa de problemas «que han surgido con el cableado eléctrico». Ahora, la nueva cita es para dentro de unas semanas cuando, si todo sigue según el calendario previsto, los cuatro quioscos pasarán a ser historia.
Los quioscos que serán objetivo de las máquinas de demolición están ubicadas, concretamente, ante los números 115 y 105 de la Rambla Nueva, en Cronista Sessé (plaza Anselm Clavé) y en el cruce de Marqués de Montoliu con Sant Antoni Maria Claret. En su momento, Acero ya declaró que «se encuentran en muy mal estado y con las persianas completamente llenas de pintadas». En algunos, la base presenta un adelantado estado de deterioro y partes metálicas oxidadas.
El Ayuntamiento intentó varias veces recuperar la actividad de los quioscos mediante concursos públicos, pero el resultado fue negativo. Algunos hace muchos años que permanecen cerrados y su estado de conservación es precario y, además, ocupan de manera innecesaria parte del espacio público. Hoy día, sólo suponen un obstáculo para los peatones y la imagen que ofrecen es bastante negativa. De hecho, ya la pasada Navidad el concejal Acero no descartaba hacer extensiva la política de derribo en otros quioscos de la ciudad que también están vacíos e inactivos desde hace bastante tiempo, y todo hace pensar que seguirán en esta situación en el futuro.
Unos de los que suponen un mayor obstáculo es el de Cronista Sessé, que ocupa un extremo de la plaza urbanizada que hay entre esta calle y Rovira y Virgilio.