Seis días haciendo cola para poder «cruzar la mirada» con el cantante Pablo Alborán
Las incondicionales del artista llegaron a las puertas de la TAP viernes a las ocho de la mañana para esperar al concierto que ofrecerá este miércoles
El artista malagueño Pablo Alborán ha vuelto a los escenarios después de dos años forjando a fuego lento su cuarto disco de estudio, 'Prometo'. Este miércoles, a las diez de la noche, llega a la Tarraco Arena Plaça rodeado de una enorme expectación, dentro del Tour Prometo 2018. Sus seguidores del territorio ya lo esperan como agua de mayo, de aquí que desde el viernes pasado haya admiradoras haciendo cola en la puerta de la TAP, para conseguir situarse en la primera fila de la pista. «Llegué aquí el viernes a las ocho de la mañana y avisé a uno de los chicos de la organización de que acamparíamos en la zona de las taquillas. Somos un grupo de unas 35 chicas de toda España que vamos haciendo relevos en la cola», explicaba ayer Alma Martínez, de 27 años, natural de Reus. «Como yo era el que tenía más cerca el concierto, fui la primera a quedarme», puntualizaba. Alba Lama y Ainoa Llamas, de 18 años, son dos de las integrantes de este numeroso conglomerado de amigas que se ha ido fortaleciendo a base de compartir muchas horas de espera en las puertas de los pabellones de todo el país. «Nosotros dos somos de Barcelona, hemos venido con el coche a hacer cola y nos volveremos a marchar, nos guardarán el lugar otras compañeras», desvelaban. La noche del lunes al martes hasta once chicas acamparon en la entrada de la TAP. El hecho de que el recinto esté situado en plena ciudad, en una calle transitada, no ha hecho que las jóvenes durmieran con un mayor temor. «La idea es que seamos siempre un grupo grande para pasar la noche, no dejaríamos a una persona sola», apuntaba Llamas.
¿Pero qué motiva a estas chicas a esperar prácticamente seis días, la actuación del artista, en plena ola de calor? Sara López de 43 años, habla por todas las presentes: «Pablo es un artista que tiene mucho contacto visual con el público más próximo. Es una persona muy sensible que te transmite como se siente. En cada actuación lo notas. Si él se siente bien, nosotros también», resume esta valenciana apasionada por Alborán que en lo que va de gira ya lo ha seguido en Madrid y Marbella y tiene previsión de hacerlo también el 18 de agosto en Alicante. Para López, cruzar miradas con el malagueño (ya lo ha vivido) no se paga ni con todo el oro del mundo.
Hielo y libre acceso al lavabo
Para hacer frente a las temperaturas vividas en los últimos días las jóvenes han tenido la fortuna de poder contar con la complicidad de uno de los establecimientos de restauración próximos, que ha permitido acceder en su baño de forma gratuita y ha entregado tantos cubitos de hielo como han solicitado a estas enamoradas de las baladas románticas de Alborán. «Hay de todo, gente que nos ayuda y que se interesa por nosotros y de otras personas que no nos tratan demasiado bien», explicaba una de las jóvenes, quién relata que un vecino del bloque frontal las había increpado, gritando que se fueran a trabajar, en vez de hacer cola para un concierto.
Entre canciones del malagueño, libros y mucha conversación, las chicas han acabado llegando al esperado día «D». Lo único malo con lo que han habido de lidiar es, como la mayoría de tarraconenses, con el mal olor de los contenedores y de los orines de los animales en las fachadas. «Hasta este martes por la mañana hacíamos cola en las puertas y estábamos muy bien, pero nos han movido hacia la zona de la acera y ahora tenemos los contenedores en frente. Hacen muy mal olor y las siguientes que lleguen tendrán que estar al lado de unas meadas» comentaban.