Muere el historiador Josep Fontana, doctor honoris causa por la URV
Nacido en Barcelona el año 1931 ha sido un científico humanista que ha hecho de su profesión una contribución a la visión crítica del mundo
El historiador Josep Fontana (Barcelona, 1931), considerado el mejor representante vi de la historiografía catalana, ha muerto este martes a los 86 años. Fontana fue investido el 10 de junio de 2010 doctor honoris causa por la Universitat Rovira i Virgili.
Nacido en Barcelona en 1931, era catedrático emérito de Historia Económica en la Universitat Pompeu Fabra (UPF) desde el año 2001. Científico humanista y un maestro generoso con sus discípulos, ha hecho de su profesión una contribución a la visión crítica del mundo. Durante su nombramiento como doctor honoris causa, la que fue a su madrina, la historiadora de la universidad Montserrat Duch, lo calificó «de intelectual brillante y sólido referente ético». Fontana definía al historiador como un paradigma de universitario por sus conocimientos, su espíritu crítico y su contribución al cambio de la sociedad. Duch asegura que ha sido un maestro generoso con sus discípulos que ha hecho de su profesión «una contribución a la visión crítica del mundo».
Es autor de una lista larga de obras, algunas de las cuales se han traducido a diferentes idiomas. Una parte de su bibliografía trata del paso del antiguo régimen al capitalismo, otras son obras de síntesis, como la historia del mundo después de la Segunda Guerra Mundial que codirigió con Ramon Villares y una parte constituyen aportaciones múltiples, como la Historia de los hombres.
Su padre era librero y a los siete años le regaló años los primeros libros. Le gustaba explicar que eligió el oficio de historiador por la influencia de tres maestros: Ferran Soldevila, Jaume Vicens Vives y Pierre Vilar, más tarde, personas que le hicieron comprender que trabajar en un cierto sentido con la historia era también trabajar para el país, por un país marcado por el franquismo. Apartado pronto de la enseñanza, por motivos políticos, legó su tesis doctoral en 1970 y ganó cuatro años desprendido una cátedra de Historia Económica a la Universidad de Valencia.
Fue también fundador y director durante diez años del Institut d'Història Jaume Vicens Vives, de la Universitat Pompeu Fabra hasta que en el 2001 se jubiló. Ha enseñado historia en la UB, en la UPF, en la UAB y a la Universidad de Valencia. Ha recibido varias distinciones, entre las cuales la Medalla de Oro al Mérito Cultural que recibió en el 2002 del Ayuntamiento de Barcelona y también se le otorgó la Creu de Sant Jordi el año 2006. Un año más tarde, en el 2007, recibió el Premi Nacional de les Arts de la Generalitat.