Ballesteros critica el «nacionalismo entendido como aislamiento» en la ofrenda en Allende
El primer edil del Ayuntamiento de Tarragona ha lamentado el auge de la xenofobia y de la extrema derecha en Europa
La tradicional ofrenda floral al expresidente chileno Salvador Allende delante de su busto en el Camp de Mart ha servido al alcalde de Tarragona, Josep Fèlix Ballesteros, para criticar «el nacionalismo entendido como aislamiento», reivindicando la unión entre los diferentes pueblos «para poder encontrarse en todos lados como nuestra casa».
El alcalde se ha mostrado «muy orgulloso de Cataluña», en la línea de su discurso anterior a la ofrenda a Rafael Casanovas, «porque hemos decidido ser una tierra de acogida». El primer edil también ha criticado en su discurso el auge del racismo y la xenofobia por toda Europa a través de los partidos de extrema derecha emergentes, ejemplarizándolo con los resultados de los recientes decomises en Suecia.
El acto, organizado por la asociación Allende de Tarragona ha contado con la participación de la mayoría de fuerzas políticas progresistas (Esquerra Republicana, PSC, Iniciativa, Cataluña en común, Izquierda Unida) y también del PDeCAT y de Ciudadanos, además de los sindicales mayoritarios, UGT y CCOO. A diferencia de años anteriores, en esta ocasión también ha estado presente el Subdelegado del Gobierno del Estado en Tarragona, Joan Sabaté (PSC).