La comedia gestual y la voz de los 'Tenors' abre la temporada de la Sala Trono-Armanyà

El humor gestual y la potencia de voz de Tenors, de la compañía Il·luminati, son los encargados de levantar el telón este jueves y de estrenar la nueva temporada en la Sala Trono-Armanyà. Hasta enero, 17 compañías catalanas e internacionales presentarán sus propuestas, comoYerma, dirigida por el tarraconense Marc Chornet; Màtria, de Carla Rovira Pitarch; El llarg dinar de Nadal, de la compañía La Ruta 40; o Les Dones Sàvies, de la compañía El Maldà. Esta está la segunda temporada en el espacio, caja escénica de Teatre Metropol, después del traslado de la antigua Sala Trono en la Part Alta de Tarragona. Con la primera temporada cerrada y otra a punto de empezar, el gestor y programador de la Sala Trono-Armanyà, Joan Negrié, hace buen balance del traslado. «Cabe más gente, las compañías trabajan con más comodidad y estamos en el centro de la ciudad», ha valorado.

Desde este jueves hasta el domingo, las voces de tres tenores serán las que resonarán en la Sala Trono, que impresionarán al público y lo harán reír con la comedia gestual. «Es la representación cómica de la vida de un tenor», resume Negrié, que explica que la función enseña cómo tres tenores se preparan para el espectáculo y, de alguna manera, compiten para lucirse y demostrar que cada uno de ellos es capaz de hacer la nota más larga, o la más aguda, o de cantar más fuerte, en un escenario donde sólo hay tres atriles y un piano de cola.

El programador de la Sala Trono-Armanyà anima a los espectadores a descubrir la cartelera, «indispensable para conocer el teatro contemporáneo catalán y lo que pasa y preocupa a las compañías contemporáneas». «Todas estarán en la Sala Trono», ha asegurado Negrié, convencido de que mostrarán el talento internacional, local y también local, «de artistas tarraconenses que defendemos siempre».

Después de bajar el telón en el antiguo local, en la calle Misser Sitges, la Sala Trono está satisfecha con la reubicación. «Aquí estamos muy bien», ha admitido Negrié, que detalla que la caja escénica del Teatro Metropol es un espacio más amplio, cabe más gente y ofrece más comodidad a espectadores y a las compañías, que pueden trabajar «con más tranquilidad a nivel técnico». «Las compañías aprovechan las cuestiones técnicas para dar más potencia a los espectáculos», ha dicho. Además, la localización, junto a la Rambla Nova, les da «más difusión».

Aparte de las sensaciones, las cifras también constatan que el traslado es positivo. En la anterior temporada, de febrero a mayo, la Sala Trono Armanyà cerró con 3.125 espectadores, 1.300 más que en el mismo periodo del año anterior, cuando todavía actuaban en el antiguo local, con menos aforo. Así, la ocupación ha rondado el 85%. Arrancan la segunda temporada con la intención de repetir.

La Sala Trono programa para esta temporada el concierto de los argentinos Miau Trío; la compañía Nexus Europa y Les Antonietes trae Escenes d'un matrimoniy también se programa Yerma, con la puesta en escena de Marc Chornet. También se verá en la Sala Trono-Armanyà El Niño de la Tele, de la compañía Flyhard Producciones; Ni con tres vidas que tuviera, de la compañía La Peregrina y RqueR Producciones, basada en la entrevista de Jordi Évole en el exmiembro de ETA Iñaki Rekarte a 'Salvados'.

Sembla que rigui, de Óscar Constantí y Mont Plans, abrirá la programación de noviembre, que continuará con Mentalismo reservado, del mago y mentalista argentino Tony Montana, Magicomic (l'antiestrès), de Jordi Pota; Conexiones, Alba y Ceci Zen; a más de Màtria i El Declive, de la compañía Banfield teatro ensamble; i Instantáneas, la danza del ballet Amaia Dorronsoro.

Para despedir el año, FACK15ANYS, de Roger a Benet, se estrenará en la Sala Trono-Armanyà. En el 2019 lo empezará Paraules d'amor, una comedia que rinde homenaje a las «muchas maneras de hablar el catalán, no siempre conforme con las normas de la Academia, de los abuelos o padres». Elllarg dinar de Nadal i Les dones sàviescerrarán la temporada a finales de enero.