Rechazan que los marchantes aprovechen elementos públicos para tensar el toldo

La Asociación de Vecinos Tarragona Centre considera que «el Ayuntamiento utiliza una vara de medir diferente» para situaciones similares. La entidad cuestiona que marchantes del mercadet de Corsini y alrededores utilicen farolas y barandillas para tensar los toldos con cuerdas, pero el caso más paradigmático es el de un punto de venta que «ata la cuerda en un elemento ornamental» situado en la puerta de acceso al Mercat Central localizada en la calle Reding.

La presidenta de la asociación, Núria Sabat, manifestó en esta redacción que, «a nosotros, el Ayuntamiento no nos hace caso nada de». Sabat comparó la situación del puesto del mercadet que utiliza un elemento original de 1915, año en que se inauguró el edificio modernista del Mercat Central, obra del arquitecto Josep Maria Pujol de Barberà, con una propuesta que la asociación hizo al Ayuntamiento, de «colocar un toldo en la plaza Corsini, como se hace en calles de ciudades como Sevilla en verano, porque no hay ningún tipo de sombra». La respuesta municipal fue negativa. «El Ayuntamiento nos dijo que no era posible ponerlo porque el Mercat Central es un edificio histórico y no se podía tocar ningún elemento para poner los tensores», dijo a la presidenta. En este contexto, Sabat apuntó que «todavía estamos pendientes de que pongan la pérgola que se nos prometió: ni es, ni se lo espera».

La presidenta de la asociación considera que «la utilización del elemento ornamental del edificio para tensar el toldo se puede considerar como un acto incívica, ya que el Mercat Central, por su historia, es como un monumento». Sabat dijo que «a los marchantes se les permite todo» y recordó que cuando ponían sus puntos de venta en la Rambla Nova «hacían lo mismo con la estatua de los Despullats». Sabat apuntó, también, que, «finalmente, hay coches de los marchantes en Corsini los días de mercadet que ensucian el suelo por escapes de aceite de los vehículos, sin embargo, en este caso, el Ayuntamiento actúa con manga ancha y los deja hacer».

«No hemos visto el parque infantil»

Sabat recordó que la asociación «pidió un parque infantil a Corsini, de sólo diez por diez metros, y el Ayuntamiento nos dijo que no había espacio para ponerlo». «El mismo nos pasó con lo que pedían en la calle Ixart», dijo Sabat, para añadir que «hace dos años nos aseguró que en mayo estaría hecho, después de que no había dinero y, finalmente, que sí que lo pondrían, pero nada de nada». La decisión final fue no dotar en Ixart de un parque infantil porque «planteaba un problema de seguridad, cuándo este se solucionaría poniendo unas vallas, cómo se hizo en el de la plaza de los Infants.»

Sabat, después de recalcar que la asociación que preside no responde a los intereses «de ningún partido político», dijo que «tenemos claro que, hasta las elecciones –mayo de 2019–, el Ayuntamiento no hará nada porque ahora empieza la época de las promesas, como la que ha hecho el alcalde Josep Fèlix Ballesteros que todo el transporte público será gratuito.» Sabat se preguntó «porque no lo hace ahora, ya que es el alcalde?».

Por otra parte, la presidenta de Tarragona Centro dijo que «todo lo que la asociación pide va a parar al desierto», y como ejemplo apuntó que «hace tres años que pedimos papeleras por la zona del Mercat Central y alrededores, y el Ayuntamiento nos dice que no hay ningún problema, pero el cierto es que no las pone».