Urbanismo
La aseguradora FIATC opta a comprar los terrenos de Ikea para hacer uno sociosanitario
El objetivo es construir un centro de atención junto a la Anella Mediterrània, mientras que otros inversores apuestan por hacer un hotel
Mientras que la posibilidad que la multinacional sueca Ikea abra un centro comercial al PP-10, en la Anella Mediterrània, se desvanece, l’asseguradora FIATC ya ha suscrito la opción de compra de unos terrenos para construir un sociosanitario en la zona, que incluiría una clínica privada, según ha podido saber esta redacción. Además, el Ayuntamiento ha recibido el interés de particulares por otros terrenos con capacidad de albergar residencias para deportistas y estudiantes, y para una instalación hotelera.
Fuentes municipales han confirmado a Diari Més que, desde el pasado mes de julio, el Ayuntamiento no tiene noticias de Ikea y está a la espera del cual la multinacional sueca se pronuncie y diga si, finalmente, aterrizará en el PP-10 o hará marcha atrás en su intención de abrir un establecimiento comercial en la zona.
El Ayuntamiento ya está cansado de esperar la decisión de Ikea, ya que quiere sacar adelante, cuanto antes mejor, las obras de urbanización del PP-10, adjudicadas a Dragados. La llegada de FIACT y de otros inversor facilitaría llevar a cabo un proyecto por el cual suspira el Ayuntamiento. Las fuentes municipales consultadas apuntaron que el Ayuntamiento busca alternativas en Ikea y estas empiezan a llegar.
Han pasado ya unos meses que el Ayuntamiento hizo llegar a la central de Ikea el contenido de sentencias judiciales que afectaban en los terrenos, una documentación que la multinacional quería estudiar en profundidad antes de tomar una decisión definitiva sobre su implantación en Tarragona. Aunque hace unos meses que la recibió, la empresa no se ha pronunciado ni a favor ni en contra abrir un centro comercial al PP-10, circunstancia que no gusta al Ayuntamiento. En este tiempo, la multinacional sueca ha introducido cambios en el sistema de comercialización de sus productos, huyendo de la construcción de nuevos establecimientos como el que había previsto por Tarragona y sustituirlos por tiendas urbanas de tamaño más pequeño. La aparición de nueva competencia como la que hace Amazon y un incipiente cambio de hábitos de los consumidores, que empiezan a abandonar los centros comerciales para volver a las ciudades, son aspectos que Ikea sopesa.
Han transcurrido más de seis años del momento en que se conoció el interés de Ikea por instalarse en Tarragona. La primera noticia se produjo en el 2012. Desde entonces, varios contratiempos han retrasado el proyecto, entre los cuales recursos planteados por propietarios de terrenos que ya se han resuelto judicialmente y de cuyo contenido fue informada la multinacional. El tiempo transcurrido y la ausencia de un posicionamiento claro han perjudicado el calendario de desarrollo del PP-10, que tiene que transformar el entorno de la Anella Mediterrània. El plan B del Ayuntamiento empieza a funcionar y el proyecto podría experimentar un giro en los próximos meses.