Política
Momentos de tensión en las jornadas de formación de VOX
Grupos de izquierda, independentistas y republicanos se han concentrado en las puertas del local de Bonavista donde tenían lugar
Bonavista acoge esta mañana las jornadas de formación de VOX que tuvieron que cambiar de sede hasta tres veces por la negativa de los dos hoteles donde se iban a celebrar. Finalmente, la Braseria Cabrera de la calle Tres de Bonavista se ofreció a acogerlas. Las jornadas han empezado a las nueve de la mañana y se alargarán hasta las siete de la tarde, con una comida en este mismo establecimiento.
El día ha empezado movido con la concentración de grupos de izquierda, independentistas y republicanos que se han presentado delante del local de la calle Tres de Bonavista. En un primer momento todo estaba tranquilo, con un cordón policial de los Mossos de Esquadra que impedía avanzar a los manifestantes que se oponían a las jornadas del partido de extrema derecha. Los momentos de tensión se han ido incrementando con varios actos. Los manifestantes han chillado el lema «Pim, pam, pum, que no quede ni uno» y un hombre, que tomaba algo en un bar más próximo a la braseria, lo ha repetido de manera que un grupo de participantes a las jornadas de VOX se han acercado increpándolo. Los Mossos han aparecido rápidamente y los hechos, más allá de gritos y amenazas, no han ido a más.
Otro de los momentos de tensión ha sido cuando uno de los participantes de VOX ha salido del local y ha pasado por el medio del grupo que se concentraba en la puerta y, según comentan algunas fuentes, el hombre habría enseñado el culo provocando a los manifestantes que por poco no han llegado a las manos. Finalmente, la presidenta de VOX, Isabel Lázaro, antes de entrar en la braseria se ha acercado a los manifestantes y les ha tirado besos. La concentración antifascista ha quedado desconvocada hasta esta tarde a las seis cuando las jornadas encararan la recta final.