Nuevo frente común entre Cataluña y la Comunidad Valenciana para impulsar el Corredor Mediterráneo

El tramo entre Castellón y Tarragona es un «eslabón fundamental» del Corredor del Mediterráneo. Así lo han vuelto a reivindicar los representantes de la Generalitat de Catalunya y Valenciana, académicos, las patronales y los representantes sindicales que se han reunido este sábado en Vinaròs (Bajo Maestrat) en el congreso 'Sin Castellón – Tarragona, no hay corredor'. El comisionado del Desarrollo del Corredor del Mediterráneo, Josep Vicent Boira, ha reiterado que la infraestructura es el «proyecto estratégico más importando del Estado español» y que es «el momento de trabajar intensamente en el tramo de Castellón- Tarragona». Por otra parte, Boira ha adelantado que se reunirá con la Agencia de Seguridad Ferroviaria a principios de la semana que viene para conocer el estado de la variante de Vandellòs que se tiene que poner en funcionamiento la próxima primavera.

Los agentes económicos, sociales e institucionales de la provincia de Castellón y de la demarcación de Tarragona han reflexionado sobre el estado actual del Corredor del Mediterráneo en la jornada 'Sin Castellón – Tarragona, no hay corredor, organizada por el Instituto Ignasi Villalonga. Los ponentes han vuelto a reivindicar el impulso que necesita esta infraestructura que han definido como una «vergüenza histórica».

El comisionado del Desarrollo del Corredor del Mediterráneo, Josep Vicent Boira, ha insistido en el hecho de que el tramo entre Castellón y Tarragona «es un eslabón fundamental en la cadena que representa el corredor» y ha recordado que ya están en periodo de licitación los once kilómetros entre Martorell y Castellbisbal. «Las obras se iniciarán en un plazo razonable y permitirán la instalación del tercer hilo, por lo tanto, del ancho internacional, y eso enlazará todo el corredor mediterráneo que ya está lo bastante adelantado en el norte de Castellbisbal con el del sur que no lo está tanto», ha dicho Boira.

A la vez, el comisionado ha señalado que se reunirá con la Agencia de Seguridad Ferroviaria la semana que viene. «Es una primera reunión, de contacto», ha apuntado. Boira encara este encuentro con el objetivo de poner la oficina del corredor a disposición y contribuir en el proceso de verificación de la seguridad en la variante de Vandellòs, que está prevista que entre en funcionamiento la primavera próxima. Con todo, Boira ha añadido que la «seguridad tiene que prevalecer en una obra como esta», y que si hace falta se entumecerá a fin de que se cumplan los estándares» de seguridad.

El comisionado también se ha pronunciado sobre la afectación de la aprobación de los presupuestos generales del Estado. «Si no se aprobaran la oficina del corredor todavía tendría mucho trabajo, de coordinación, del diseño de las conexiones y de la ejecución», ha constatado. Y en este sentido, ha remarcado que «muchas veces el problema no son el dinero sino la ejecución» de las obras.

Para el secretario de Infraestructuras y Movilidad del departamento de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat, Isidre Gavín, el corredor «no es un caso de éxito en el 2018», sino todo el contrario. Y es que considera que es una muestra de la «mala planificación, priorización y gestión» del gobierno central. Como muchos de los ponentes, Gavín también ha criticado el modelo radial ferroviario español y ha recordado que si el proyecto está entre los mapas europeos está «gracias» en Europa.

Por todo ello ha valorado que se tiene que poner el acento en las conexiones. «No nos vale que se nos diga tranquilos que conectaremos Algeciras con la frontera el año 21 - fecha que no nos cuadra-, si los puertos de Castellón, Tarragona, Barcelona, Valencia y las plataformas logísticas y empresas no están conectadas», ha destacado Gavín.

Unidad para seguir reivindicando el corredor

Por su parte, el conseller de Economía de la Generalitat Valenciana, Rafael Climent, ha pedido más contundencia para que el corredor sea una realidad después de tantos años reivindicándolo. «Tenemos que ser más contundentes con el gobierno central mande quien mande, porque sino los territorios no tienen viabilidad política ni dignidad para dar los servicios». Aunque ha admitido que el ejecutivo de Pedro Sánchez es mucho más dialogante que el de Mariano Rajoy ha criticado que al final tampoco da respuesta. «Hemos cambiado de un gobierno que no nos escuchaba por uno que si, pero que no hace nada en aquello que es importantísimo», ha concluido.