Muchos usuarios de terrazas de la calle Lleida superan el límite establecido

La prueba piloto que el Ayuntamiento está llevando a cabo en la calle Lleida, con la delimitación de los espacios destinados a las terrazas de bar y a los peatones, muestra que muchos de los usuarios de estos superan el límite establecido, como se ha demostrado en las primeras horas de la aplicación de la medida. Un primer motivo podría ser que el espacio reservado en las terrazas es insuficiente. Con las sillas recogidas, las líneas de color blanco pintadas en el suelo delimitan a la perfección las dos zonas. No sucede lo mismo cuando se sientan los clientes, que están obligados a retirar las sillas hacia atrás para no chocar con las piernas de las otras personas con las cuales comparten la mesa. Además, si algún cliente va acompañado de un carrito de niño pequeño, entonces ya es casi imposible respetar el límite decidido por el área de Movilidad. El Ayuntamiento adoptará una medida definitiva cuando finalice la prueba piloto que inició el pasado fin de semana.

Fuentes municipales informaron el jueves de que esta actuación sólo afectará a la calle Lleida, donde los últimos años han proliferado las terrazas, y que no es extrapolable a otras zonas de la ciudad donde la convivencia entre las terrazas de bar y peatones es, también, bastante complicada e, incluso, incompatible.