Un padre se enfrenta a 22 años de prisión por abusar de la hija y una amiga

JM.E.D se enfrenta a 22 años de prisión por abusar sexualmente con acceso carnal de su hija ­-quan esta era menor— hasta en cuatro ocasiones. En el último supuesto abuso, el acusado también realizó tocamientos a una amiga de la chica. El juicio contra el investigado empieza hoy en la Audiencia provincial.

El calvario de la hija del acusado empezó en una fecha indeterminada entre 2002 y 2003, cuando la víctima tenía entre 5 y 6 años. Según el escrito de acusación de la Fiscalía, el padre «se metió en la cama de la menor con el pretexto que esta tenía miedo». En aquel momento acusado y víctima vivían en el mismo domicilio, ubicado en Tarragona. El hombre le pasó la mano por la nuca, puso a la menor encima suyo y se restregó con su miembro durante un espacio de tiempo.

Dos años más tarde después de este presunto abuso sexual, los padres de la chica se divorciaron. Sin embargo, los episodios de abusos se fueron repitiendo en el tiempo. Seis años después del último abuso, la mañana del 31 de diciembre de 2009, el padre se encontraba con la víctima y la otra hija en una autocaravana en Tarragona. En un momento determinado, el padre le realizó diferentes tocamientos por encima de la ropa, según relata el fiscal.

Pasó un año y el acusado volvió a actuar, esta vez en el domicilio familiar, donde el padre ya no vivía. En aquel momento, la madre se encontraba enferma en el hospital y el padre cuidaba de las dos menores. El hombre empezó a hacer cosquillas a la misma víctima y le pidió que se quitara la ropa. Ante esta petición, la menor le pidió que se detuviera. Lejos de hacerlo, el acusado le dio un beso en la boca, le bajó el pantalón le realizó tocamientos y también una penetración, según describe el Ministerio Fiscal que pide que el hombre no se pueda acercar al domicilio de la víctima, al lugar donde ella estudia y a las zonas que esta frecuenta a una distancia inferior de 500 metros. También le impide comunicarse con ella por cualquier otro medio durante 20 años. El Fiscal le exige una indemnización de 5.000 euros a la chica por los «daños morales» ocasionados. Actualmente la chica tiene 21 años.

Abuso a la hija y la amiga

Cuatro años después del último abuso, la víctima y una amiga suya se encontraban en el piso familiar. Era 2014 y la hija tenía 17 años. El investigado empezó a decirles «que estaban muy buenas y que bailaran con él», señala al fiscal. De nuevo, al despedirse, el investigado realizó tocamientos a las dos chicas en diferentes partes íntimas del cuerpo. La Fiscalía pide 3 años de prisión por tres delitos de abusos sexuales y 10 años más por un delito de abuso sexual con acceso carnal.

El hombre, que ahora tiene 64 años, se enfrenta a tres años más de prisión por abusar sexualmente de la amiga de su hija. Además, el Ministerio Fiscal impone la prohibición de aproximarse a esta chica en una distancia inferior a 500 metros durante un periodo de 5 años. También le prohíbe comunicarse con ella a través de cualquier medio y le impone una indemnización de 1.000 euros por los daños morales ocasionados. Las pruebas que presenta el fiscal son el interrogatorio del acusado y los diferentes testimonios del caso que presentará durante el juicio.