Absueltos los tarraconenses que fueron imputados por el 'caso Catalunya Caixa'

La Audiencia de Barcelona ha absuelto de todos los delitos a los 41 acusados del caso Catalunya Caixa, juzgados por administración desleal y apropiación indebida, entre los cuales hay doce personas vinculadas a las comarcas de Tarragona: Maties Vives, Gabriel, Ferraté, Jaume Antich, Manel Fuster, Miguel Ángel López Mallol, Francesc Xavier Farriol, José Isern, Juan Boronat Gutièrrez, Juan Carlos Boronat Rodríguez, Juan Carrera, Josep Nolla y José María Valles. Entre las personas que fueron juzgadas también se encontraban al expresidente de la entidad, Narcís Serra; Adolf Todó, exdirector general; Joan Güell, vicepresidente primero, y Antonio Llardén, vicepresidente segundo de la entidad.

El tribunal no aprecia comportamiento delictivo ni en la decisión misma ni en el proceso que condujo hasta la decisión. Aunque señala la evidente situación de recesión en la cual se produjeron las decisiones, entiende que los informes existentes en la causa y las testificales acreditan la inexistencia de elementos que permitan tipificar los acuerdos perseguidos como delito. Los delitos de administración desleal y de apropiación indebida se entendieron así por las acusaciones por los acuerdos aprobados en dos reuniones del consejo de administración de la entidad en los cuales, en plena crisis económica, con notable reducción de los beneficios, se incrementó el salario de algunos de los principales responsables.

La fiscalía rebajó a tres años la petición de prisión para Serra y Todó por dos delitos de administración desleal. La fiscalía también pedía una multa de 67.500 euros para los dos. Finalmente, las 41 personas imputadas han sido absueltas.

Cinco años con bienes embargados

El tarraconense Manel Fuster manifestó ayer en esta redacción que «han sido cinco años con nervios en el estómago que no te los saca nadie» y comentó que «cuando te imputan, siempre hay gente» que dice que algo habrás «hecho». Es por eso, y por haber tenido los bienes embargados durante cinco años que se mostró muy satisfecho por la sentencia absolutoria. Curiosamente, no ha sido hasta ahora que Fuster ha sabido que «estaba en libertad condicional». «Es incomprensible que nadie me llamara», remarcó.

Manel Fuster representaba al Ayuntamiento de Tarragona en la junta general de Caixa Tarragona y fue escogido para formar parte del consejo. Fuster comentó que el caso se inició como consecuencia de una decisión tomada «por el consejo que aprobó la fusión de las cajas de Manresa, Tarragona y Catalunya, que acordó subir el sueldo a Narcís Serra y Adolf Todó un 1.5%, como constaba en su contrato, y fue eso lo que se nos imputó».

Fuster dijo que, «personalmente, después de dos meses y medio de juicio, como neófito llegué a la conclusión que no nos podían condenar, porque la subida de sueldo estaba en el contrato y todo era correcto». Fuster fue concejal del Partit dels Socialistes de Catalunya en el Ayuntamiento de Tarragona.

Por su parte, el abogado tarraconense Maties Vives no entró a valorar la sentencia, pero si que recordó que en el mismo momento en que fue imputado –representaba a la Diputació de Barcelona– presentó su dimisión como concejal del ayuntamiento de Montblanc y conseller del Consell Comarcal de la Conca de Barberà. «Lo volvería a hacer, pero pienso que una persona, por el hecho de estar imputada, no tiene que dimitir de los cargos», apuntó.

Los argumentos del tribunal

En la sentencia, el tribunal argumenta que la crisis económica «ya se manifestaba con toda su intensidad» durante los aumentos salariales denunciados, y había «una persistente e inclemente destrucción de puestos de trabajo que aumentaba hasta niveles angustiantes». Según la Audiencia de Barcelona, en estas circunstancias «críticas» los «sustanciosos aumentos salariales aprobados» por el consejo de administración de la entidad «resultaban sin duda difícilmente digeribles para la población». Con todo, el tribunal asegura que «no es en absoluto misión» de la Audiencia hacer «una valoración moral de las conductas» de los ahora absueltos, sino declarar si se sostiene de acuerdo con las normas «juridicopenales». Además, argumenta que no se ha probado una administración desleal, que precisa la «innegable presencia» de voluntad de cometer un delito y que los acusados busquen «beneficio propio o de uno tercero» que cause un perjuicio directo.

Según la sentencia, los ingresos acreditados de Adolf Todó el año 2008, al inicio de la crisis, fueron de 684.713,97 euros, todo en fijo, en 2009 subieron a los 900.826 (700.486 fijas y 200.340 en variables), y en 2010 subieron hasta los 1.368.929 euros (800.481 fijos y 568.448 variables). Finalmente, en 2011 el sueldo de Todó fue de 940.601 euros, de los cuales 812.501 en retribución fija y 128.100 en variables.

El secretario general de CCOO de Cataluña, Javier Pacheco, dijo ayer que la absolución de la antigua cúpula directiva de Catalunya Caixa es «un insulto a la inteligencia» de la sociedad. Según su opinión, hace falta que la sociedad económica del país reflexione y se dé cuenta de que estos abusos no se pueden permitir. Pacheco se mostró indignado.