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Animales

Entra en vigor hoy la prohibición de llevar los perros a todas las playas de Tarragona

El Ayuntamiento todavía no ha habilitado los «can-espais» prometidos

Una ruta de Tarragona a Tamarit para hacer con perro

Una ruta de la Playa del Milagro Tarragona a Tamarit para hacer con perroPixabay

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De Cambrils a Cubelles hay kilómetros de costa con ausencia de playas donde poder llevar el perro. A partir de hoy, Tarragona prohíbe a los dueños de estos animales a llevarse sus animales de compañía en la playa así como circular en bicicleta. La normativa, fijada por la ordenanza de convivencia cívica aprobada el año 2005, establece que esta prohibición es vigente hasta el 15 de octubre, englobando por lo tanto la Semana Santa, el verano y las fiestas mayores.

Hasta ayer, los perros que pisaran la arena tenían que ir al lado de su amo, atados con correa o cadena y, si el perro es considerado potencialmente peligroso, también tenía que llevar bozal.

La nueva ordenanza de tenencia de animales estipulaba además que había que evitar que hicieran las deposiciones en la arena o en el agua y, en caso de que sea inevitable, se tenían que retirar inmediatamente los excrementos o la suciedad producidos. Estas normas, sin embargo, tan sólo son vigentes de octubre a marzo.

A la espera de espacios reservados

A pesar de las promesas hechas a raíz de la aprobación de la nueva ordenanza de animales el año 2017, hasta la fecha no se ha establecido ningún espacio autorizado por el Ayuntamiento a fin de que no haya que dejar el animal en casa para poder ir a la playa. En aquel momento el gobierno municipal hablaba de «can-espais» y se regularon a través de dos artículos.

Inicialmente, la concejala Ana Santos planteaba la posibilidad de que fuera una sola playa la que acogiera un espacio de estas características. Los nuevos «can-espais», que se desconoce cuando se implementen, tienen como objetivo que los animales «estén en buenas condiciones».

Multa de 1.500 euros

La sanción a que se exponen los propietarios de los animales puede llegar a los 1.500 euros, en caso de que alguna de las patrullas de la Guardia Urbana detecte la presencia de estos animales en la costa del término municipal. No se trata tan sólo de las playas urbanas sino también aquellas naturales más dadas a excursionistas y campistas –una práctica también prohibida por la ordenanza.

La única excepción a la que se hace referencia es a los perros de asistencia o de guía.

Dónde sí que son bienvenidos

Hasta el martes posterior a Pascua, Salou permite que los perros –siempre que no molesten– estén en la playa. Es a partir de entonces que se prohíbe su presencia hasta el primer domingo de noviembre. Después de Semana Santa, otros municipios sí que les dan la bienvenida. Son la playa de la riera de Alforja, mientras que en Miami Platja la prohibición es sólo en el horario de máxima afluencia.

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