Figueras destaca la apuesta clara por las mujeres y la juventud del Ecce-Homo
La rectora de la URV, Maria José Figueras, presenta el opúsculo de la hermandad y subraya la tarea que realiza la presidenta, Elvira Ferrando
«Para mí es un honor que una entidad como la vuestra, con más de 150 años de vida y con las raíces en el siglo XVI, haya pensado en mí para presentar vuestro opúsculo», eran las palabras de agradecimiento que pronunciaba ayer a la rectora de la Universitat Rovira i Virgili (URV), Maria José Figueras, durante la presentación del opúsculo de la Germandat del Sant Ecce-Homo en la iglesia de Sant Agustí de Tarragona. Figueras tomaba así el relevo de Joan Martí Castell, el catedrático emérito de Filología Catalana y primer rector de la URV quien presentó el opúsculo de la hermandad el año pasado.
Figueras evocó sus primeros recuerdos de la Semana Santa tarraconense. «Se remontan unos cincuenta años atrás, y me devuelven a un balcón de casa de mis tíos Carmen y Pepe, que estaba donde vivía el único abuelo que llegué a conocer, a la abuela Francisca, en la Rambla Nova. Desde aquí seguíamos la procesión del Sant Enterrament con mis padres y hermanos», decía. Y recordaba también lo que es un espacio común para muchos tarraconenses: «Desde allí recuerdo dos visiones: una, abajo en la calle, con la solemne procesión, el silencio, el repique de timbales y tambores... Y la otra, dentro de la casa, donde casi de manera paralela seguíamos Ben-Hur, Bernadette u otras películas típicas del Viernes Santo, en un pequeño televisor en blanco y negro».
Durante la presentación, la rectora describía a la gente de Tarragona como «participativa y acogedora», unos calificativos que, según reconoció ayer, le habían inspirado las palabras que el arzobispo de Tarragona, Jaume Pujol, ha dedicado al opúsculo del Ecce-Homo. «Estamos acostumbrados a socializar, a cerrar filas, a unirnos y a colaborar en proyectos comunes que, aunque a menudo empiecen por parecer objetivos imposibles, acaban volviéndose factibles, convirtiéndose en auténticas y genuinas maravillas», apuntaba en este sentido.
«El tarraconense más italiano»
Maria José Figueras repasó punto por punto los nombres de todas aquellas personas que han participado en el opúsculo de la hermandad y arrancaba las sonrisas del público al hablar del padre Mario Buonanno, de quien dijo tener «buenos recuerdos en el Llorito», para añadir que «recuerdo comentarios de mi madre y de mi padre sobre su tarea con el Telèfon de l'Amistat, y de los sorteos y tómbolas por Navidad, en los que mi familia de comerciantes participábamos siempre, aportando premios y regalos». Presentó al padre Mario Buonanno como «el italiano más tarraconense que conocemos», para después puntualizar que «aunque quizás tendría que decir el tarraconense más italiano que tenemos». De la presidenta de la hermandad, Elvira Ferrando, destacó su «apuesta clara por la juventud y las mujeres que ha hecho el Ecce-Homo a la hora de asegurarse savia nueva y seguir progresando». Su hija, Yasmina Armesto Ferrando, ha sido la creadora de la portada del opúsculo, para quien Figueres también dedicó unas palabras.
Finalmente, Maria José Figueres, recordaba a los asistentes que, este año –y tal como se recoge en el nuevo opúsculo– se verán los resultados del proceso de restauración de la peana del paso. «Un año de trabajos, entre planificación y ejecución, que verán por fin la luz esta Semana Santa», decía.