El PSC se impone en cinco de los once distritos electorales que dividen la ciudad de Tarragona
Los socialistas cedieron seis distritos a Esquerra, pero superaron a los republicanos por 2.438 votos
El Partit dels Socialistes de Catalunya ganó las elecciones generales celebradas el domingo en 5 de los 11 distritos en que se divide Tarragona, mientras que Esquerra Republicana de Cataluña se impuso en 6. Sumando todos los votos válidos emitidos a la ciudad, el partido socialista consiguió 16.657, sobre un total de 69.116, y la formación independentista recibió el apoyo de 14.219 electores.
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El PSC fue la fuerza más votada en Sant Pere i Sant Pau (2.185 votos), Torreforta y Barris (2.013), Campclar (1.810), Bonavista (1.390) y Sant Salvador (736). ERC lo fue en Nou Eixample Norte (3.513), Urbanizaciones de Llevant (2.229), Eixample Tarragona (2.007), Nou Eixample Sud (1.781), Barris Marítims (1.272) y Part Alta (580).
El distrito donde Ciudadanos (1.982), En Comú Podem (1.624), Junts per Catalunya (1.616) y Partido Popular (1.022) consiguieron un mayor número de votos fue el de Nou Eixample Nord, mientras que Vox (694) los sumó a Sant Pere y Sant Pau. El Nou Eixample Nord, es el distrito que acumula, con diferencia, más electores. De los 16.893 con derecho al voto, las urnas recogieron 13.911 sufragios, de los cuales 13.786 fueron válidos.
Las formaciones políticas que se presentaban a la circunscripción obtuvieron, en la ciudad de Tarragona, los siguientes resultados: PSC (16.657 votos), ERC (14.219), Ciudadanos (11.131), En Comú Podem (9.305), Junts per Catalunya (5.898), Partido Popular (4.755), Vox (4.388), Front Republicà (1.186), PACMA (1.163), PCTC (84), Recortes Cero (83), IZQP (51), PCPC (47), PUM+J (45) y CNV (33).
Con respecto al porcentaje de votos escrutados, destaca de manera especial que el PSC recibió el 37,55% en Bonavista, el 35,36% en Torreforta y Barris, y el 34,56% en Campclar, y ERC el 32,22% en la Part Alta, el 26,48% en Nou Eixample Sudy el 26,39% a Urbanizaciones de Llevant.
Del resto de los partidos que consiguieron mejores resultados, Ciutadans recibió el 21,86% de los votos emitidos en Campclar, En Comú Podem el 18,31% en Bonavista, Junts per Catalunya el 13,63% a Urbanizaciones de Llevant, Partido Popular el 9,09% a Eixample Tarragona i Vox el 10,37% en Bonavista.
Panorama cambiante
Los resultados de las elecciones generales del 2019 nada tienen a ver con los de los comicios del 2016. En aquella ocasión, cuatro partidos se repartieron la victoria en los distritos de Tarragona y la fuerza que más obtuvo fue En Comú Podem, que ganó en la Part Alta (413 votos), Barris Marítims (1.073), Nou Eixample Nord (2.318), Campclar ((1.228), Sant Salvador (646) y Sant Pere i Sant Pau (1.734). El PSC se impuso a Torreforta i Barris (1.362) y Bonavista (1.043), el PP en el Eixample Tarragona (1.105) y el Nou Eixample Sud (1.402) y ERC a Urbanizaciones de Llevant (1.413)
Un duelo premonitorio
En menos de un mes los tarraconenses volverán a las urnas para escoger a sus representantes en las urnas. El PSC, de la mano de Josep Fèlix Ballesteros, parte con el reto de conservar la alcaldía. Por su parte, Pau Ricomà, de ERC, se ha propuesto que, por primera vez desde la recuperación de la democracia, Tarragona tenga un alcalde republicano e independentista. Como tercera fuerza en lucha estará Ciudadanos. Estas tres formaciones son, a priori, las mejores posicionadas para formar gobierno, sin descartar a otros invitados. En la legislatura actual, el PSC gobierna junto con un Partido Popular que, a las elecciones generales, ha sufrido una importante pérdida.
Aunque los resultados de unas generales no son extrapolables a unos comicios municipales, los resultados del domingo pueden marcar tendencia, sobre todo teniendo en cuenta que el 10 de mayo se iniciará una nueva campaña electoral.
De las elecciones de hace dos días sobresalen varios factores. Por una parte, la recuperación de los socialistas y el crecimiento de los republicanos, pero también la irrupción de la ultra derecha de Vox, que sumó 4.388 votos.
Otros factores que pueden tener una incidencia determinante son el hecho de que, contrariamente a lo que sucedió en las municipales del 2015, Convergència i Unió no se presenta e Iniciativa per Catalunya no concurrirá con las siglas tradicionales, mientras que la CUP no participó en las generales. Con los resultados del domingo pasado, Vox obtendría representación en el Ayuntamiento de Tarragona.
Disputa por la alcaldía
En el 2015 el PSC ganó con 14.333 votos; el segundo lugar fue para Ciudadanos, con 7.218, y ERC fue la tercera fuerza más votada, con 5.944 votos, 8.275 menos que en las generales de hace dos días. Se por eso que la noche electoral el candidato republicano a la alcaldía de Tarragona, Pau Ricomà, manifestó que «en las próximas elecciones el nombre del alcalde está entre el de Ballesteros y el mío» y la tendencia «apunta a un cambio porque hay que mejorar la ciudad». En la sede republicana se oyeron frases como «Ballesteros tremola, Ricomà és el que mola».
Por su parte, Josep Fèlix Ballesteros manifestó ayer que «no se pueden hacer extrapolaciones de cara los próximos comicios municipales» pero que «la tendencia es clara». En el contexto de las municipales de hace cuatro años, hay que remarcar que la cuarta bastante política fue el PP, con 5.799 votos, partido que se puede considerar como uno de los perdedores de las generales del domingo, hasta el punto de no renovar al único representante que tenía a la circunscripción de Tarragona. El quinto lugar fue para Convergència i Unió, con 5.546 votos. La desaparición de la formación democristiana y cuya transformación durante décadas lideró Jordi Pujol abre interrogantes sobre la suerte de que pueda correr Junts per Tarragona, formación que lidera Dídac Nadal y que es heredera de la coalición que formaron convergentes y democristianos. El reparto de escaños lo completaron la CUP, con dos concejales y 4.180 votos, e Iniciativa per Catalunya, con un concejal y 2.853 votos.