Ballesteros (PSC) gana en votos pero Ricomà (ERC) iguala los siete concejales

El candidato del PSC y alcalde de Tarragona, Josep Fèlix Ballesteros, ha repetido victoria en votos en los comicios de este domingo pero empatando a siete concejales con ERC, que se ha quedado a algunos centenares de votos de convertirse en la fuerza más votada. La capital de la demarcación empieza ahora el mandato instalada en la incertidumbre, a la espera de que las negociaciones postelectorales y los posibles pactos puedan dibujar un escenario de gobierno municipal estable. Por detrás de los dos partidos más votados, Cs retiene la tercera posición con los cuatro escaños de los cuales ya disponía. También Junts per Tarragona, de Dídac Nadal, retiene los tres concejales de CiU. La CUP seguirá con dos concejales y Podemos obtiene dos representantes -ICV había obtenido uno hace cuatro años. Uno de los resultados que puede alterar el escenario de pactos es la caída del PP, que pierde a la mitad de los cuatro concejales que tenía y se queda con dos.

El PSC de Josep Fèlix Ballesteros fue el partido más votado en Tarragona, a corta distancia de Esquerra Republicana. El alcalde declaró que está dispuesto a pactar «con todos los partidos menos con la CUP» para formar un gobierno que tiene que garantizar la estabilidad». Ballesteros afirmó que «pienso ser generoso» y que el partido con el cual se puede sentir «más cómodo» ante un posible pacto es con aquel que «ponga Tarragona por delante de las banderas, los himnos y las tonterías». El cabeza de lista del PSC recordó que «hemos ganado las elecciones por cuarta vez consecutiva, a pesar de que no con los resultados que esperábamos, si bien el número de votos ha sido muy similar a los que obtuvimos en el 2015». Ballesteros dijo que «mi obligación es hablar con todos los partidos, y digo todos, pero mantengo que no pactaré con la CUP». El candidato socialista dijo que la campaña se ha caracterizado por el hacer que «todos han ido contra Ballesteros» y comentó que «los independentistas no tienen mayoría absoluta y tendremos que hablar de gobernabilidad».

ERC iguala representación

Euforia en la sede de Esquerra Republicana. Liderados por Pau Ricomà, ERC consiguió los mejores resultados de la historia en la ciudad. A sólo 500 votos del PSC, los independentistas, segunda fuerza, empataron con los socialistas de Ballesteros con siete concejales, tres más que en el 2015, «Estamos legitimados para gobernar», avisaba a Ricomà de que ayer abría la puerta a un gobierno independentista con el apoyo d'En Comú Podem. A los votantes unionistas, un mensaje: «Gobernaremos para todo el mundo». Entre gritos de «Tarragona republicana y Libertad presos políticos», el cava corrió por la sede republicana en la Part Baixa. «Está claro que el pacto que quiere Ballesteros, que es con Ciutadans y el PP no suma, hay otro pacto de gobierno que quiere sacar Tarragona adelante», insistía el número 1 de ERC. «No es con Ballesteros con quien queremos acordar», sentenció.

Cs no consigue el quinto

A Ciudadanos los ánimos fueron decayendo a medida que avanzaba el escrutinio. Toda esperanza de sumar algún escaño ha quedado muy lejos al ver la distancia en que tenían respeto ERC y el PSC. Los naranjas se han quedado con los cuatro escaños que consiguieron en el 2011. Rubén Viñuales, visiblemente afectado, dio las gracias a los militantes el trabajo hecho y valoró positivamente el aumento de los votos conseguidos «hace cuatro días ni existíamos, en el 2011 sacamos 5.700 votos y ahora hemos superado los 8.000». Sin embargo, lamentó la baja participación de estas elecciones «tan decisivas». «Hay mucha gente que ahora cuando vea los resultados quizás se arrepiente de no haber ido a votar», confesaba. «La democracia, al final, es de quien hace uso sino la puedes sufrir», explicaba. Finalmente, descartó hablar de posibles pactos ya que «hace falta meditar los resultados y ponderar se que se tiene que hacer a partir de ahora».

JxT no tiene prisa para pactar

Sonrisas y gestos de incertidumbre en la sede de Junts per Tarragona, una vez conocidos los resultados. Dídac Nadal, cabeza de lista, apuntaba que «no tenemos ninguna prisa» para negociar con el resto de partidos y garantiza que «no pactaremos con nadie del 155». Eso, en la práctica, se traduce a dejar hacer a Esquerra Republicana: «No nos corresponde a nosotros hablar de pactos, no nos pelearemos por ninguna silla», afirmaba Nadal. Lo acompañarán en el plenario Cristina Guzmán y Elvira Vidal, un resultado por el cual están «muy contentos». «Hemos obtenido más votos que en el 2015 a pesar de la disolución de la antigua Convergencia», se reafirmaba Dídac Nadal, que se mostraba más satisfecho por el resultado de la candidatura en las elecciones europeas con Carles Puigdemont al frente. «Es una gran victoria», decía. Con más de 6.000 votos, Navidad sumó poco más de la mitad de los que alcanzó Puigdemont en la ciudad.

Alegría a En Comú

Carla Aguilar, d'En Comú Podem, no podía esconder su alegría después de los resultados alcanzados en los comicios, ya que «estamos muy contentos por haber doblado el resultado» de las últimas municipales. Su apuesta es clara. «Queremos sumar fuerzas a la izquierda del PSC», aunque, para conseguirlo, no tiene claro si tendrán que unir bastantes formaciones como la suya, ERC, la CUP y PDeCAT, un hipotético pacto en cuatro que dejaría fuera de combate al PSC y a Josep Fèlix Ballesteros de la alcaldía. En este sentido, Carla Aguilar dejaba claro que «creemos que hace falta un cambio de rumbo, tendrán que surgir nuevos equilibrios, pero no sabemos cuál será la fórmula». Los comunes tendrán dos concejales en el Ayuntamiento durante los próximos cuatro años, unos resultados que, según su líder, «son muy positivos porque veníamos de hacer una buena campaña con un presupuesto muy bajo».

La CUP satisfecha con mantener

Caras largas en el Casal Popular Sageta de Foc y no por los resultados en Tarragona sino por los que se pudieron ver en otras poblaciones, entre ellas Barcelona o Lleida, donde la formación perdió representación. Laia Estrada, que seguirá siendo concejala, aseguró que «ha habido factores ajenos a la dinámica local» que marcaron el voto de los ciudadanos. Por este motivo, el mantenimiento de los resultados –a pesar de sumar menos votos– consideran que es «muy positivo». Al mismo tiempo, Estrada remarcó que «el PSC empeora resultados aunque en todas partes sube» y, de cara a futuros escenarios, mantenía que «nuestra voluntad es hacer limpieza, echar todo rastro de corrupción y clientelismo, ya veremos cómo se traduce eso». «No es sólo un cambio de siglas», destacaba la cabeza de lista, que reconocía que esperaban incrementar el resultado de hace cuatro años. «Tenemos que ver qué alianzas se pueden tejer», añadía. A pesar de todo, la formación acabó abriendo el cava.

Marín (PP) seguirá «luchando»

La derrota del PP en Tarragona es clara, como lo fue en las del mes pasado. Así lo reconoció el cabeza de lista para las municipales, un José Luis Martín que apuntó que «ha sucedido como en las generales, nos ha penalizado el fraccionamiento del voto». Martín avisó de que «los votantes sabrán lo que han votado y las consecuencias que tendrá su voto». Martín dejó claro en la sede de los populares que «el Partido Popular sigue en el Ayuntamiento de Tarragona y seguirá trabajando por el bien de sus ciudadanos» y lo hizo después de «felicitar al actual alcalde, Josep Fèlix Ballesteros, que ha vuelto a ganar las elecciones». José Luis Martín no se aventuró a hablar de pactos, ya que «todavía es muy pronto».