Preocupación en la CUP de Tarragona por la falta de respuesta de ERC y En Comú Podem
Estrada se pregunta si quieren negociar y fija el 15 de julio como límite para llegar a un acuerdo de gobierno
Preocupación en la CUP de Tarragona por la falta de respuesta de ERC y En Común Podemos
Casi una semana después de la investidura del alcalde Pau Ricomà, la CUP todavía no ha conseguido una reunión conjunta con ERC y En Comú Podem Tarragona. «No tenemos respuesta», explica la portavoz cupaire, Laia Estrada. Reunidos en asamblea, una treintena de anticapitalistas coincidieron ayer en el análisis del momento. Antes de enviar el documento con las propuestas de negociación a los dos partidos quieren saber si entre los republicanos y los comunes hay interés para que la CUP entre en el gobierno.
Los militantes de la formación asamblearia decidieron no hacer público sus propuestas hasta asegurarse si las negociaciones, en efecto, se producirán. «Que a día de hoy no tengamos fecha de encuentro nos preocupa», admitía ayer Estrada. Los cupaires han mantenido contactos informales después de la investidura con ERC, pero las conversaciones no han ido más allá. El mensaje, en función del interlocutor, es diferente, explican.
El interés que mostraba Ricomà antes de su investidura en sumar a la CUP a su proyecto de gobierno parece que ya no está tan claro. Al menos es lo que se deduce de falta de respuesta para sentarse a hablar por parte de republicanos y comunes.
La número 2 de la CUP, Eva Miguel Gascón, apuntaba antes de la asamblea que «no tiene que haber ningún problema» para que las tres formaciones se puedan entender. Estrada pide a los partidos de la coalición de gobierno agilidad. Para la número 1 de la CUP, a mitades de la próxima semana se tendría que producir una reunión y fija el 15 de julio como la fecha límite para llegar a un acuerdo de gobierno. «Cuanto más tiempo pase más complicado será que la CUP se incorpore al gobierno», reconocía Estrada. Los cupaires piden, si finalmente es posible entrar en un gobierno, hacerlo «en igualdad de condiciones». «Las transformaciones más profundas se deciden los primeros meses de gobierno, con la formación del cartapacio y las primeras conversaciones con los técnicos», explicaba Gascón antes de la asamblea que tuvo lugar en el Casal Sageta de Foc de la Part Alta.
La asamblea de ayer concluyó que la «excepcionalidad» del momento «requiere que nosotros entramos a negociar si es posible entrar en un gobierno», explicaba Estrada. De momento, el teléfono no suena y la CUP sigue esperando.