Sociedad
La Guardia Urbana corta tres calles en SPiSP durante las fiestas del barrio
La invasión de la calzada de jóvenes en una sesión de un dj en el parking de camiones provoca algún susto
Sant Pere i Sant Pau acogió el sábado por la noche uno de los principales reclamos de las fiestas del barrio. El Macro Festival Electro Latino Loca FM en el parking de camiones convocó unos 600 jóvenes. Antes de la fiesta, algunos chicos y chicas empezaron a invadir la antigua carretera del Puente de l'Armentera que discurre en paralelo al solar donde se producía el concierto. El episodio provocó algún susto entre los conductores que intentaban esquivar a los adolescentes a bocinazo y frenazos. Después de algunos avisos a la Guardia Urbana por parte de vecinos alertados, la policía cortó en tres puntos el tráfico toda la noche en los alrededores del parking de camiones, concretamente a la calle Blanca d'Anjou, Miquel Serveti y en una rotonda próxima.
Santi, vecino del barrio, comenta que una amiga llamó a los agentes a las diez y media. «Tardaron entre 30 y 45 minutos en llegar», comenta. «La organización lo tendría que tener en cuenta de cara el futuro», añadía. Desde la Asociación Vecinos Sant Pere y Sant Pau, que organizó el concierto, defienden que pidieron los cortes de calle al Ayuntamiento, pero que el consistorio trasladó a la policía municipal que no era necesario restringir el tráfico. «No obstante, las vallas estaban preparadas y la Guardia Urbana vino a primera hora para comprobar la situación. Al ver que había jóvenes que atravesaban la carretera constantemente cortaron el tráfico inmediatamente», explica el presidente de la entidad vecinal, Lluís Trinidad. El representante de la asociación quiso «agradecer» el trabajo de los Mossos d'Esquadra, Ayuntamiento y Guardia Urbana por su tarea durante la tercera edición de esta fiesta que, según Trinidad, «fue todo un éxito».
La fiesta se desarrolló con normalidad, pero al acabar, hacia las cinco de la madrugada, se produjo alguna pelea entre los jóvenes, según denuncian los vecinos en las redes. El consistorio niega ninguna pelea, pero sí la presencia de jóvenes que gritaban y ensuciaban en una plaza próxima a la calle Violant d'Hongria que los agentes delimitaron con cintas, después de echar a los jóvenes. Algunos vecinos se felicitaban por el acontecimiento y otros se quejaban de la suciedad que algunos de los jóvenes dejaron en el lugar de la fiesta. Denunciaron botellas de cristales roturas, comida, vasos de plástico y restos de orina en la misma calle Violant d'Hongria.