Medio ambiente
El centro TecnATox de la URV medirá la contaminación de los retardantes de llama
Se trata del proyecto FLAMERisk del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades
El Centro de Tecnología Ambiental Alimenticia y Toxicológica (TecnATox) de la Universitat Rovira i Virgili (URV) medirá la contaminación de los retardantes de llama en los hogares, oficinas y escuelas. Se trata del proyecto FLAMERisk del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, donde los investigadores evaluarán los riesgos para la salud humana a lo largo de los próximos tres años.
Los retardantes de llama son un grupo de compuestos que se añaden a los productos de consumo, principalmente en los plásticos, para cumplir con los estándares de inflamabilidad de los productos domésticos e industriales. Algunos de ellos despiertan una gran preocupación a causa de sus propiedades persistencia, capacidad de bioacumulación y toxicidad, que pueden ser perjudiciales para el medio ambiente y la salud humana.
Los artículos más habituales que contienen retardantes de llama sueño los plásticos de los equipos electrónicos como ordenadores, monitores y televisores o los materiales con los cuales se fabrican los automóviles.
El Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades ha concedido un proyecto al grupo TecnATox para que estudie cuáles son los niveles y la distribución de los retardantes de llama en espacios interiores españoles, incluidas casas privadas, oficinas y escuelas. El estudio evaluará cuáles son las fuentes primarias de los retardantes de llama (artículos poliméricos, muebles, dispositivos electrónicos, etc.) así como el nivel de exposición humana en adultos y niños, que son más vulnerables a la contaminación. El proyecto también estudiará cómo estos compuestos pueden afectar al sistema nervioso y sus mecanismos de neurotoxicidad.
Para llevarlo a cabo se seleccionarán hogares, oficinas y escuelas del Camp de Tarragona. Para el estudio del impacto neurológico el grupo de la URV colabora con un estudio que está llevando a cabo la investigadora. Marina Lacasaña, del Instituto de Investigación Biosanitaria de Granada.