Las playas de Tarragona tienen doce lavabos públicos en 6,7 kilómetros

Tarragona tiene otorgadas cuatro banderas azules, que se corresponden con las playas Arrabassada, Savinosa, la Mora y Tamarit, pero los diferentes servicios que ofrece a los bañistas y usuarios del litoral son mejorables, como lo demuestra la ubicación del lavabo de la Llarga en Cala Romana.

La ciudad de Tarragona dispone, aproximadamente, de 6.710 kilómetros de playas, sin contar las que son naturales, como las ubicadas en el Bosc de la Marquesa. Sorprende que en la playa Llarga, de casi 3.000 metros de longitud y la que concentra a un número mayor de usuarios, el Ayuntamiento sólo ponga dos lavabos públicos, cuando en la del Miracle, de 500 metros, haya tres.

En el conjunto de las siete playas con servicios municipales sólo se contabilizan doce lavabos, muchos de los conocidos como Polyklyn. Esta cifra supone que, como media, hay un lavabo cada 560 metros. En algunas playas, como la Capellans, el lavabo se encuentra lejos de la arena y hay que desplazarse hasta la carretera de acceso a Cala Romana, en una zona reservada, donde está instalado.

La relación de lavabos públicos para cada una de las playas de Tarragona es la siguiente: Miracle, 3; Arrabassada, 3; Savinosa, 1; Capellans, 1; Llarga, 2; la Mora, 1, y Tamarit, 1.

Acompañar a tu padre de edad avanzada a un lavabo portátil de la marca Polyklyn que hay en la playa Llarga para que no caiga al suelo y se haga daño a causa de la nefasta ubicación. Eso pasó el último fin de semana en la zona de acceso localizada en Cala Romana y conocido popularmente como del tenis, y no sólo a una persona, sino a diversas. La temporada de baño del año pasado el lavabo estaba ubicado en la arena de la playa, a pocos metros de distancia del puente del ferrocarril. Este año se ha ubicado en un lugar estrecho donde, a veinte centímetros de la puerta, hay un peldaño, seguido de un segundo.

La peor ubicación

La ubicación del lavabo, probablemente en el peor sitio de todo un amplio espacio, impide su utilización a una persona con movilidad reducida y supone un peligro para cualquier usuario, con independencia de su condición física. Por sus dimensiones, no puede ser utilizado por una persona que utilice silla de ruedas en sus desplazamientos. Además, el Polyklyn, como popularmente se conoce a este tipo de lavabos portátiles, está localizado fuera de la zona de playa, una vez superados los puentes del ferrocarril y el de la Via Augusta.

Hechos como la ubicación del lavabo de este sector de la Llarga y el número que hay en las playas tarraconenses pone en duda la calidad del servicio que se pretende dar a los usuarios. En otras ciudades próximas, como Salou, los lavabos incluso son de obra, permanentes, anchos y pueden ser utilizados por varias personas al mismo tiempo.

Casos reales

El hijo de una de las personas que el pasado fin de semana tuvo dificultades para hacer uso del lavabo del sector de Cala Romana de la Llarga explicó a esta redacción que «nos encontramos con este problema un grupo de gente que fuimos a la playa». «El lavabo es inaccesible para mucha gente y supone un peligro», dijo, y explicó «mi caso y el de una compañera del grupo, que tuvimos que ayudar a nuestros padres a acceder al lavabo y, después, a salir, ante el riesgo de que se hicieran daño». «La puerta del lavabo está en dirección a un peldaño que hace complicado moverse, además de ser un riesgo para personas que tengan problemas de movilidad», remarcó.

Según este testigo presencial, «muchas personas con las que coincidimos en la playa comentamos la ubicación del lavabo y el hecho de que lo tendrían que poner en la arena, donde estaba el año pasado».