El margen de la CUP para negociar entrar en el gobierno de Tarragona finaliza en 15 días

El grupo municipal de la CUP confía en que ERC y ECP –las dos formaciones que forman parte del equipo de gobierno– les cite esta semana para continuar con las conversaciones para su posible incorporación. El tiempo se agota porque el plazo dado por la CUP para intentar un gobierno a tres bandas se acaba en quince días. La concejala Laia Estrada dijo, ayer por la mañana, que todavía no nos han convocado, y aseguró que no existen contactos «entre pasillos». Preguntada si es optimista en relación a la posibilidad que en Tarragona haya un gobierno tripartito de izquierdas, Estrada dijo que «no se trata de ser optimista o pesimista, sino poder trabajar» en caso de que se llegue a un pacto con las otras dos formaciones. Estrada insistió en decir que la incorporación en el gobierno de la ciudad, si esta finalmente se produce, «tiene que ser resultado de un acuerdo de programa».

Estrada recordó que «la entrada de la CUP en el gobierno se tiene que producir antes de agosto», por lo cual el acuerdo se tendría que cerrar en un periodo máximo de dos semanas. «Nosotros trasladamos una propuesta con 59 puntos para que el gobierno diga cuáles acepta y cuáles no». «Se trata de debatir sobre estos temas», remarcó.

Estrada afirmó que hay un compromiso con ERC y EPC de no entrar en detalles sobre el contenido de las negociaciones. En este contexto, la portavoz del grupo señaló que «respetamos el tempus deliberativo y mantenemos nuestra demanda de hacer la segunda reunión esta semana, pero, aunque nos gustaría comunicar más cosas –a los medios de comunicación–, no lo hacemos porque nos han pedido que seamos discretos». En este sentido, «no nos sentimos cómodas porque no hay nada que esconder, pero así nos lo pidieron y lo respetamos», dijo la concejala cupaire.

ERC, ECP y CUP tienen muchos puntos en común, pero su política no se coincidente en aspectos especialmente relevantes en la política actual, como es el independentismo. En asuntos sociales y urbanísticos los deferentes posicionamientos son más próximos. El acuerdo a tres bandas facilitaría la toma de decisiones por parte del equipo de gobierno, siempre que sus propuestas tengan el apoyo de Junts per Tarragona.