Sanidad
La UCI Neonatal del Joan XXIII cuenta con nuevas sillas y reposapiés para el método canguro
El dinero para comprar el material se ha conseguido con un calendario solidario impulsado por profesionales de la pediatría en colaboración con la Associació Som prematurs
La UCI Neonatal del Hospital Joan XXIII de Tarragona ha incorporado un total de cinco sillas y cuatro reposapiés nuevos a fin de que los padres y madres los puedan utilizar para realizar el método canguro. El material se ha podido adquirir gracias al dinero recaudado con un calendario solidario hecho a iniciativa de profesionales de la pediatría del centro en colaboración con la Associació Som prematurs, que se encargó de la impresión.
El método canguro, también conocido como método piel con piel, favorece el vínculo entre los padres y los bebés prematuros. Precisamente este año 2019, el Hospital Joan XXIII celebra el 25º aniversario de la puesta en marcha de este método.
El método Canguro
El método canguro consiste en la colocación del niño, desnudo, con un gorrito y un pequeño pañal, en posición vertical de manera que el tórax del bebé quede en contacto con el de la madre o el padre. Se intenta iniciar este procedimiento lo más pronto posible, desde el nacimiento. Si el bebé está clínicamente estable, se puede realizar aunque precise apoyo respiratorio, catéteres, perfusiones o sondas. Es recomendable que cada sesión de método canguro dure, como mínimo, una hora. Cuanto más prolongado sea, mejor, siempre que el bebé y la madre o padre estén cómodos.
El método es sencillo, tiene poco coste económico y tiene numerosos beneficios para los padres y para los bebés, todos ellos con evidencia científica. Las principales ventajas son: menor número de infecciones, la temperatura que mantiene el niño es tan buena como si estuviera dentro de la incubadora, facilita la lactancia materna, disminuye los episodios de apnea y las necesidades de oxígeno, el bebé aumenta el peso, y todo eso hace que hay haya más estabilidad y disminuya la estancia hospitalaria. Además, favorece precozmente el vínculo entre los padres y su hijo, el conocimiento mutuo y, por lo tanto, aumenta la confianza y el grado de competencia de los padres. Es una técnica que permite el desarrollo neurológico y emocional de los recién nacidos inmaduros.
El método canguro surgió en Colombia, en los años 70, cuando la superpoblación provocó una falta tan importante de material y personal sanitario que hasta tres bebés prematuros tenían que compartir una incubadora. Para solucionar este problema, pensaron que se podrían utilizar las propias madres de los bebés como incubadoras. Y así nació este método. Los resultados fueron tan buenos que hoy en día se ha convertido en la práctica habitual de las unidades neonatales de todo el mundo y es uno de los pilares fundamentales de los cuidados centrados en el desarrollo y la familia. La Unidad Neonatal del Hospital Joan XXIII ofrece el método canguro desde 1994 y fue pionera en su aplicación en España.