Medio ambiente
La SUS recoje 100 kilos de desechos del fondo marino de la playa del Miracle
La entidad realizó la acción para limpiar el agua de los restos del concurso de fuegos artificiales y, del total extraído, un 60% pertenecía al material pirotécnico
La Sociedad de Exploraciones Submarinas de Tarragona (SUS) consiguió sacar del agua de la playa del Miracle ayer domingo por la mañana un total de 100 kilos de desperdicios, de los cuales unos 60 pertenecían al material pirotécnico del concurso de fuegos artificiales de julio. La entidad, que lleva realizando esta tarea para limpiar la playa después del concurso de fuegos desde hace unos 10 años, tenía asignado un año más el contrato por este servicio con el Ayuntamiento, el cual financia el material de sumersión, la gasolina y las dietas para los submarinistas.
Tal como explica el presidente de la entidad, Manel Salcedo, el 60% del material encontrado constaba de entre 4 y 5 bolsas de 15 kilos cada una llenas de la grava negra que ayuda a aguantar los cohetes. El resto de material eran residuos de plástico, chatarra y tubos de hierro. De entre el desperdicio, uno de los objetos más pesados fue un trozo de unos 20 kilos de piedra de obra de una valla del cual la entidad no conoce la procedencia. También encontraron material de pesca como hilos y plomo que provendría, según explica Salcedo, de la gente que pesca en las rocas del Fortí de la Reina.
La limpieza, como cada año, estaba abierta a cualquier submarinista que quisiera participar y en esta ocasión la jornada contó con voluntarios de Greenpeace, los cuales hicieron la inmersión en apnea. La Cruz Roja, que actúa conjuntamente con todas las inmersiones que realiza la SUS, también colaboró con una moto acuática que acompañaba a los submarinistas.
El recorrido de la batida, que dura normalmente unas dos horas, se hizo en torno al espigón del Fortí de la Reina, teniendo como límite la línea de boyas.
Después de esta limpieza, la SUS tiene previstas para este año dos actuaciones más en la playa del Miracle, una después de las fiestas de Santa Tecla y la siguiente en octubre por el cierre de la temporada de playas.
Retraso sin consecuencias
Durante la jornada de limpieza, Salcedo comentó que la acción de este año no se pudo hacer justo al día siguiente de acabarse el concurso, como normalmente lo hacen, por un «tema administrativo», sin embargo, «el domingo 7 tampoco se habría podido hacer porque el mar no estaba muy fino para poder estar una hora dentro», añade.
Si bien el hecho de hacer la limpieza 3 semanas más tarde pudo repercutir en la cantidad de restos que se hubieran podido recoger porque, mientras van pasando los días el mar va arrastrando desechos, Salcedo quiso aclarar que, en algunas ocasiones, aunque la extracción se haga justo el domingo siguiente del concurso, a veces coincide en que hay muy corriente en el agua y de esta manera, a menudo no «se encuentran todos los kilos de plástico con que se tendrían que encontrar».
Aparte de eso, el presidente de la entidad también explica que, desde hace unos años, el concurso utiliza más material biodegradable (cartón que se va deshaciendo) y ya no se recoge tanta carcasa de plástico como antes, un hecho que ha repercutido en el volumen total de desperdicios extraídos. De hecho, tal como explica, en el 2014 se llegaron a recoger hasta 350 kilos de restos de materiales pirotécnicos caídos dentro del agua y en el 2018 menos de 100, una cifra que coincide con la de esta edición.