Comercio
El centro de Tarragona y la Part Alta tienen 1.120 locales comerciales vacíos
Según datos municipales, facilitados por PIMEComerç Tarragona, en el 2015 la ciudad registraba más de 4.000 locales vacíos en todo el centro y Ponent
Tarragona dispone, al menos, de 1.120 locales comerciales vacíos. Es la principal conclusión que se desprende de un estudio a pie de calle realizado por el Departamento de Promoción Comercial del Ayuntamiento en julio de 2018, el resultado del cual ha sido facilitado a Diari Més por PIMEComerç Tarragona. Para hacer el estudio se contaron uno por uno los locales vacíos en la Parte Alt y el centro, teniendo en cuenta los alrededores del Mercat Central y las calles del entorno de la Rambla Vella y la Rambla Nova. Si a los locales se suman los parkings y los trasteros, la cifra sube a unos 1.500 locales sin actividad sólo en el centro de la ciudad.
«En Tarragona hay una fuga de comercio. Antes, cuando cerraban locales, se abrían otros. Ahora no existe esta visión. Estamos dando una imagen de desertización del comercio en la ciudad», lamenta el presidente de PIMEComerç de Tarragona y la provincia, Florenci Nieto. Desde la patronal de la pequeña y mediana empresa se muestran preocupados por la degradación comercial que la ciudad arrastra desde hace años y que empezó con la llegada de la crisis económica.
Según los datos facilitados por Nieto, de los 1.120 locales comerciales vacíos del centro y la Part Alta, 321 reunirían las condiciones para acoger un negocio. El Ayuntamiento dispone de datos de locales vacíos actualizados en 2015 que contemplan todo el centro de la ciudad y los barrios de Ponent con la excepción de Llevant. Hace cuatro años, el área de Comerç señalaba que había 5.058 locales vacíos en la ciudad sin tener en cuenta los barrios de Llevant. De estos, el 80%, es decir, 4.046 locales, estarían en condiciones de acoger un negocio y tener actividad.
En algunas zonas del centro de Tarragona, el rótulo de «se alquila» enganchado en los locales de la ciudad es un monólogo. Calles como Apodaca y Unió y numerosas vías del Eixample destacan por la presencia de locales desiertos. Nieto atribuye la eliminación de comercios a los efectos de la dura crisis económica que todavía se notan con contundencia en el ámbito social y económico de las ciudades. Para el presidente de PIMEComerç Tarragona la reciente liberalización del mercado de los alquileres de locales también ha contribuido. «Muchos comercios no han podido mantener el negocio porque el alquiler ha aumentado mucho y han tenido que cerrar. El peso que ganan el modelo de negocio de los grandes centros comerciales en detrimento de los pequeños negocios y el imparable aumento de las compras por internet afectan directamente a las pequeñas y medianas empresas.
Mejorar la imagen
Desde la patronal de la pequeña y mediana empresa, Nieto subraya la importancia de mejorar la imagen de las calles con locales vacíos y abandonados para incentivar y atraer empresarios que quieran ocupar los establecimientos. «Es el pez que se muerde la cola. Si un empresario tiene ganas de invertir en la ciudad, pero ve que las calles están vacías, con pocos comercios y oscuros que invitan a la delincuencia, pensará que es el lugar menos indicado para invertir», observa.
Una de las soluciones que propone el representante de los empresarios es la colocación de vinilos, carteles de plástico en los locales vacíos «para limpiar la imagen patética del local comercial cerrado y olvidado desde hace mucho tiempo». Nieto cree que puede ser una manera de atraer inversores. Otra de las posibles herramientas para afrontar el problema –y que ya se empezaron a plantear con el anterior gobierno municipal– irían encaminadas a sancionar a los propietarios de locales vacíos, cerrados y que den una imagen de abandono. «No soy partidario de sanciones, pero sí que podríamos buscar alternativas para crear opciones entre los jóvenes, dar oportunidades a los emprendedores», puntualiza Nieto.
Desde PIMEComerç Tarragona apuestan por elaborar una batería de propuestas y trasladarlas al nuevo equipo de gobierno de la plaza de la Font. La intención es trabajar conjuntamente con la Cámara de la Propiedad Urbana, con quien la patronal firmó el pasado febrero un convenio de colaboración que tiene el objetivo de «incentivar a los propietarios en la gestión de sus locales vacíos y mejorar las condiciones de los contratos de arrendamiento». En este sentido, Nieto apuesta por unos «alquileres blandos» de cara a los nuevos empresarios «que se adapten a la evolución del negocio». Unos alquileres, que se irían incrementando a medida que los ingresos del negocio aumentaran.
Durante la campaña de las elecciones municipales del 26 de mayo, ERC hacía una clara apuesta por el comercio de proximidad. Entre sus medidas, ERC planteaba un «Plan de Dinamización comercial en la Part Baixa» y la «Rehabilitación de las Calles Unió y Apodaca ampliando la zona para peatones con el fin de recuperar un eje comercial, que liga el Mar con la Rambla gracias a una Vía Comercial del Mar. El futuro proyecto Illa Corsini que tiene que revitalizar el entorno de la plaza y peatonalitzar sus calles, tendría que incentivar el sector comercial de la zona.