El ranxet que se cocinaba en las barcas vuelve con fuerza al Serrallo

Sólo han hecho falta dos ediciones de los Tastets del Serrallo para que el presidente de la asociación de vecinos del barrio marinero, la entidad organizadora de esta actividad, David Martín, pudo decir ayer domingo que la iniciativa gastronómica «está consolidada». Martín destacó que en la primera edición, celebrada el año pasado, «participaron cinco cocineros, personas que habían ido al mar o hijos de estas», y en la que tuvo lugar ayer «fueron doce los cocineros, que prepararon seis Tastets para 240 personas». De un año a otro «hemos más que duplicado todo, porque la gente del Serrallo se involucra en todo aquello que se le pide».

Martín comentó que los Tastets empezaron con «el objetivo de dar a conocer el ranxet, la comida que se hacía en las barcas de pescadores, una cultura gastronómica que se ha transmitido de generación en generación». «El encuentro ha sido muy agradable y divertido, y todos los participantes han disfrutado del ranxet», dijo Martín, quién «agradeció a las personas que, de manera desinteresada, han participado en la organización de los Tastets, muy especialmente a los cocineros y cocineras, y a Raffa, que nos ha servido unos helados artesanos.»

El presidente de la Asociación de Vecinos del Serrallo apuntó que «en la primera edición hicimos corto y, en esta, enseguida se vendieron los 240 tickets». La degustación tuvo lugar en la pérgola de voramar, junto a la sede de la Cofradía de Pescadores, y fue amenizada por DJ Carlos.

La segunda edición de los Tastets se hizo unos días después del anuncio que los días 2 y 3 de noviembre el Serrallo recuperará el tradicional Concurso de Mestres Romescaires, que este año introduce la modalidad destinada a niños de 10 a 15 años. «La primera edición se hizo en 1951» y, después de cuatro años sin celebrar el concurso, «lo recuperamos con la intención de mantener su vigencia y hacerlo cada dos años», dijo Martín. La semana pasada, el presidente de la asociación de vecinos habló de las características históricas del Serrallo y el hecho de que la gente que reside allí «es muy participativa en todo lo que se le propone». Martín destacó que cuando la Asociación de Empresarios de Hostelería de Tarragona propuso la recuperación del concurso, muchas entidades se sumaron al proyecto. «Todo se decidió de manera rápida», remarcó Martín, quien se mostró muy satisfecho por la respuesta de la gente en los Tastets y la que, está seguro, también tendrá el Concurso de Mestres Romescaires.