El Mercado Medieval llena las calles de la Parte Alta a pesar de la lluvia

El Mercat Medieval de Tarragona llegó el pasado fin de semana al cuarto de siglo. El presidente de la entidad organizadora, Josep Maria Valderrama, manifestó en esta redacción que «ha venido mucha gente, pero el cambio de fecha ha perjudicado». En ediciones anteriores, esta propuesta se hacía coincidiendo con las fiestas del Pilar, dijo Valderrama, quién también comentó que «aunque se han juntado varias circunstancias negativas, todo ha ido muy bien». El responsable de la organización del Mercat Medieval apuntó que, además del cambio de fecha, «a causa de la huelga convocada para el pasado viernes hizo que viniera poca gente y hoy –para ayer– tampoco nos está acompañando el tiempo». Sin embargo, Valderrama se mostró «muy satisfecho» por el hecho que el Mercat Medieval «ha llegado a los veinticinco años y está del todo consolidado».

Valderrama remarcó que iniciativas como el Mercat Medieval contribuyen a «activar el comercio de los alrededores de la Catedral y, de hecho, de toda la Parte Alta, porque las calles se llenan de gente que disfrutan de los espectáculos y de ver y comprar en las paradas|puestos que se instalan en el Pla de la Seu y a la calle de las Coques». Valderrama también destacó que el Mercat Medieval «es un atractivo turístico, siempre hay muchos turistas y personas que vienen de poblaciones próximas a Tarragona».

Las ofertas de los comerciantes participantes en el Mercat Medieval fueron de todo tipo, destacando las vinculadas al mundo de la gastronomía, como una parada que vendía productos típicos de la isla de Menorca, pero también había cerámica de la Provenza o varias cervezas artesanales elaboradas por empresas del territorio de Tarragona y venidas de otros puntos de Cataluña.

Paradas que ofrecían bisutería, quesos, embutidos, especies, dulces, pasteles artesanales, jabones, productos aromáticos, ungüentos, hierbas medicinales o juguetes eran algunas de las que se pudieron visitar a lo largo del pasado fin de semana en el Mercat Medieval.

Valderrama comentó a esta redacción que el Mercat Medieval está «más que consolidado» y supone «un motivo para venir a la Parte Alta, tanto para comprar los productos que se pueden encontrar en las paradas como disfrutar de las actividades lúdicas que organizamos y que recuerdan cómo era el pasado medieval de nuestra ciudad».