El profesor de la URV, Toni Gironès, recibe dos prestigiosos premios de arquitectura

Toni Gironès, arquitecto y profesor de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la URV (ETSA), concibió el Museo del Clima de Lleida en un proceso que duró 11 años, a causa de la crisis económica.

Las dificultades, sin embargo, lo retaron a pensar nuevas soluciones para sacar adelante el proyecto, que finalmente se inauguró el año 2017.

Ahora recoge los frutos con dos premios, los más importantes de su trayectoria: el premio especial del Panorama de Obras, dentro de la undécima Bienal Iberoamericana de Arquitectura y Urbanismo, y el Premio de Arquitectura Española 2019, que otorga el Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España.

El concurso para construir el Museo del Clima, un espacio museístico dedicado a la divulgación científica y el conocimiento del medio ambiente, el clima y la ciencia, que el Ayuntamiento de Lleida convocó el año 2008, preveía un edificio de 3.000 metros entendido como contenedor cerrado dentro de un recinto de 12.000 metros cuadrados, en el cual dotara de contenido las salas de exposiciones.

Pero los acontecimientos hicieron que Gironès aportara «grandes dosis de diseño e ingenio» para «romper con aquello evidente y lógico», como reconoce el jurado del Premio de Arquitectura Española 2019, para acabar transformando la propuesta en lo que es ahora: un recinto que disuelve los límites entre el interior y el exterior para experimentar e interpretar el clima, y que llega a los 36.000 metros cuadrados, excediendo de largo la intervención inicial.

Eso es porque aprovechó las áreas de los alrededores calificadas como zona verde y diseñó un gran espacio público en el cual se optimizan los materiales obtenidos a partir del movimiento de tierras para activar la vegetación propia del terreno donde se ubica. Así, como el clima es el objeto del museo, el continente se convierte en el contenido. Gironès ideó la obra a partir de los elementos naturales de la tierra, el fuego, el aire y el agua como recursos con un planteamiento que hace inseparable la naturaleza de las tramas preexistentes.

Como reconocimiento, el 7 de octubre recibió en Asunción (Paraguay) el premio especial del Panorama de Obras, de la Bienal Iberoamericana de Arquitectura y Urbanismo, a la cual se presentan cerca de un millar de propuestas de los países latinoamericanos, España y Portugal. El jurado reconoce en el Museo del Clima «un ejemplo de creación de espacio público, carergat de poética, y con un uso de los materiales muy cuidado».

En esta ocasión Gironès fue premiado junto con el arquitecto brasileny Paulo Mendes da Rocha.

Este premio se suma a lo que recogerá el próximo 28 de noviembre: el Premio de Arquitectura Española 2019, que otorga el Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España, a partir de las propuestas de los diferentes colegios del Estado.

El de Cataluña presentó la obra del Museo del Clima de Gironès, que será galardonado ex aequo con el proyecto Life Reusing Posidonia, en el municipio de Sant Ferran de Formentera, del equipo de arquitectos Ibavi, para ser «equipamientos públicos ejemplares con preocupación por la investigación y la sostenibilidad».