Entidades y vecinos de la Part Alta trabajan para integrar los MENA

Crear conocimiento y redes de unión con los menores de edad no acompañados. Esta fue la conclusión a la que se llegó en la asamblea vecinal y de entidades organizada por el Casal Popular Sageta de Foc y otros colectivos, con el fin de conseguir un barrio vivo y libre de racismo.

Miembros de la plataforma Farts de Soroll, de la Plataforma Antifeixista, del Grupo de Castellers Niños de Tarragona, de la Colla Jove Xiquets de Tarragona, del Casal Popular Sageta de Foc, de Cau de Lluna y algunos vecinos del barrio de la Part Alta asistieron a esta asamblea para tratar de llegar a consensos y poner en común diferentes propuestas con el fin de conseguir un barrio libre de racismo. Nil Martínez, de la Plataforma Antifeixista y educador social de MENA en Tarragona, explicó a los asistentes quiénes son los jóvenes no acompañados, qué necesidades tienen y como de desamparados se encuentran por parte de la Generalitat de Catalunya.

Concretamente, algunas de las propuestas que surgieron a la asamblea son, en primer lugar, hablar con los jóvenes no tutelados para ver cuáles son sus intereses. Por eso, se destacó la importancia de conocer a estos jóvenes y crear una red de unión entre el barrio y ellos. Otra propuesta fue la de organizar clases de catalán para los MENA, siempre y cuando ellos estén interesados y hay bastantes profesores voluntarios para llevarlas a cabo. Finalmente, también se propuso organizar unas jornadas participativas en el barrio, con diferentes actividades conjuntamente con las entidades e instituciones. A la pregunta de si hay xenofobia en la Part Alta, Mar Cros, de Cau de Luna, aseguró que «hay racismo al barrio, como en las instituciones y como en todos los sitios». Cross explicó también que el próximo 21 de noviembre habrá otra asamblea para tratar de sacar adelante las propuestas tratadas ayer.

Eso, días después de que, justo en el barrio de la Part Alta, se iniciara una recogida de firmas para expulsar, literalmente, «a los inmigrantes delincuentes y reincidentes». El presidente de la Associació de Veïns de la Catedral, Jordi Ferré, puso en marcha esta recogida de firmas porque, según aseguró en su momento, los vecinos del barrio estaban hartos de la inseguridad en que viven y pidieron su expulsión inmediata de la ciudad. Ferré explicó que se trata de MENA y jóvenes mayores de edad de origen marroquí que vienen a Tarragona a delinquir y atribuía culpa a la Generalitat de Catalunya, al Estado español y al Ayuntamiento de Tarragona. Desde la AVV Catedral, también aseguraron que pondrían en marcha un sistema de serenos con el fin de intentar reducir la inseguridad en el barrio de la Part Alta.