Buny activa los patinetes eléctricos en pruebas ante el silencio del gobierno

Algunos vecinos se han sorprendido este fin de semana al ver patinetes eléctricos de alquiler compartido de la empresa Buny en varios aparcamientos de bicicleta de la ciudad, en los que todavía ayer se podían encontrar: Marqués de Montoliu, Vidal y Barraquer o Parte Alta, entre otros. Concretamente, los que estaban aparcados en el paseo del Miracle fueron retirados el pasado viernes por la Policía Portuaria y, según el Ayuntamiento, la compañía todavía no tiene la autorización necesaria para operar en la ciudad.

Sin embargo, el director de Buny, Sergi Monferrer, en declaraciones en Diari Més, explicó que sólo se trata de una prueba piloto, mientras están a la espera de que el consistorio confirme la fecha definitiva para poder empezar a operar en la ciudad. «Es una prueba de conectividad, para ver que la aplicación funciona y a fin de que todo salga bien», aseguró Monferrer. El pasado julio, Buny ya estaba interesada en hacer esta prueba piloto pero el Ayuntamiento decidió llevar a cabo antes una reunión con otras compañías que también querían operar en Tarragona. Monferrer explicó a este medio que en la reunión, el pasado agosto, la empresa comentó al consistorio que querían realizar esta prueba de conectividad y de servicio, pero sin concretar unas fechas exactas. La compañía critica la falta de respuesta del Ayuntamiento en las diversas ocasiones en que han intentado contactar para fijar una fecha para realizar estas pruebas previas.

Monferrer aseguró que después de conocer, a través de un medio de comunicación, que en enero se reanudarían las negociaciones entre consistorio y empresas para operar en la ciudad, Buny ha decidido hacer las pruebas piloto durante estos días. «Lo que queremos es colaborar con el Ayuntamiento y con la ciudad».

Tenemos pensado hacer descuentos a parados de larga duración y a estudiantes», sostuvo al director de la compañía. Este aseguró también que no habrá concurso público y que, por lo tanto, todas aquellas empresas que quieran operar en Tarragona lo podrán hacer, siempre y cuando cumplan los requisitos que marque el Ayuntamiento. Monferrer defendió que su empresa y otra fueron las únicas que, en la reunión con el consistorio, propusieron un sistema de anclaje, es decir, que los patinetes se aparquen en los aparcamientos de bici con candado, «hecho que no propiciará lo que pasa en Madrid, por ejemplo, que se encuentran muchos tirados por las calles de la ciudad». Con respecto a los aparcamientos, Monferrer defendió también que Buny propone que sean las mismas empresas que acaben operando en la ciudad las que se hagan cargo de la instalación de nuevas zonas de parking por los patinetes eléctricos.

Unos 25 o 30 vehículos de movilidad personal (VMP), sin contar con los retirados por la autoridad portuaria, son los que los tarraconenses pueden probar durante estos días. El sábado fue el primer día en que los patinetes estuvieron toda la jornada en la calle y según el director de Buny «tuvieron una muy buena acogida y el número de viajes realizados fue elevado». Según Monferrer, aunque la Policía Portuaria retirara los que había estacionados en el paseo, la compañía no ha recibido ninguna notificación por parte del consistorio con respecto a los otros patinetes repartidos por la ciudad.

Por su parte, el conseller de Espais Públics del Ayuntamiento, Xavier Puig, aseguró en declaraciones en esta redacción que no tiene constancia de que la empresa española haya intentado contactar con el consistorio. «Al contrario, nosotros sí que hemos intentado contactar con ellos», defendió Puig. El conseller añadió que, en la reunión del pasado agosto, con las compañías habían dejado claro que el escenario de que se hablaba para que entraran a operar era principios de 2020. Puig, sobre la prueba piloto, dijo que tienen que «valorar» la actuación por parte de Buny y que «la entrada de este servicio en la ciudad se tiene que hacer de manera ordenada y en ningún caso caótica».