De Tarragona a Dallas
Sociedad
«Las escuelas disponen de una gran cantidad de recursos»
Núria Rivas Pomerol está trabajando de profesora de educación infantil en una escuela de Dallas, en los Estados Unidos
Núria Rivas Pomerol es una tarraconense de 24 años que, después de vivir experiencias como profesora en Italia y Noruega, trabaja actualmente como maestra de una clase en la escuela Neighborhood Christian Learning Center of Dallas, en los Estados Unidos. Rivas estudió el Grado de Educación Infantil con mención de lengua inglesa en la URV.
—Qué motivos la llevaron a marcharse de casa para ir a vivir al extranjero?
—El deseo de seguir mejorando como maestra y las ganas de seguir sumando experiencias en sistemas educativos de todas partes me hizo plantear la opción de aplicar al programa de Profesores Visitants que ofrece el Ministerio de Educación. Previamente había tenido otras vivencias muy enriquecedoras en países como Noruega e Italia que me habían despertado inquietudes para descubrir otras metodologías o perspectivas.
—Cuál fue su primera impresión al llegar?
—Uno de los aspectos que me sorprendió más cuando llegué fue la necesidad de tener coche para poder desplazarte y la magnitud de las distancias. Necesitas coche prácticamente para ir a todas partes y te puedes pasar horas y horas diarias conduciendo. Es un país con una gran oferta de oportunidades y que presenta una gran diversidad de culturas.
—fue muy sorprendente el cambio o fue, más o menos, tal como se lo había imaginado?
—El cambio fue bastante sorprendente. Supongo que es muy diferente la visión que se puede tener viajando de manera temporal a un país en la de quedarse a trabajar. Esta segunda implica cambiar costumbres, horarios, maneras de hacer tanto a nivel profesional como personal. Recuerdo que los primeros meses de adaptación fueron muy intensos.
—Cuáles son las principales diferencias entre Dallas y su casa?
—Hay muchos aspectos que diferencian la manera de vivir de la gente de Dallas a la de Tarragona. En Dallas el día a día empieza en general más bien, la escuela por ejemplo empieza en las 7.40. Con respecto a los hábitos alimenticios, aquí puedes encontrarte de todo, personas que cuidan muy rigurosamente la alimentación y otros que no.
Pero lo que me sorprende más es que la gran mayoría de personas que conozco no dedican tiempo a cocinar, ya que prefieren comprar la comida en restaurantes, establecimientos de comida rápida o comida precocinada en supermercados. Piensan que hacerse la comida requiere mucho tiempo y el tiempo para ellos son dinero.
El hecho de tener que ir al supermercado, comprar, cocinar, limpiar, etc. los supone un esfuerzo demasiado grande. Con respecto al consumo de plástico y el reciclaje, que es un tema que me preocupa bastante, en Tarragona veo a la gente cada vez más mentalizada al reducir y reutilizar, en cambio aquí por ejemplo noto que se hace un uso abusivo de contenedores de plástico o utensilios para la comida y las bebidas. Dallas es una ciudad con una oferta muy amplia a nivel cultural y de actividades de ocio y de tiempo libre, en cambio Tarragona dispone de una oferta bastante más reducida.
—Cuáles son los lugares más característicos de su nueva ciudad de acogida?
—Ver el famoso skyline formado por edificios muy característicos de la ciudad. Visitar Forth Worth Stockyards, un distrito histórico que te transporta a la vida del oeste, donde puedes disfrutar incluso de los rodeos. Ir al Centro American Airlines, un espacio muy flexible, a presenciar alguno de sus espectáculos; conciertos, partidos de la NBA con los Mavericks o de hockey hielo con los Stars. También hay un conjunto de espacios público al aire libre como el White Rock Lake, Katy Trail o el Klyde Warren Park, que ofrecen una gran diversidad de actividades y propuestas gratuitas, tanto para los adultos como para los más pequeños.
—Qué destacaría de la manera de trabajar de Dallas?
—De Dallas destacaría la cantidad de horas que la gente de aquí puede llegar a trabajar diariamente. Con respecto a la educación, la importancia que dan a los resultados académicos y a los exámenes estatales en la educación primaria. Y la gran cantidad de recursos de los que disponen las escuelas.
—Qué destacaría del trabajo que está desarrollando en el país?
—Me gustaría destacar la gran tarea que llevan a cabo muchos educadores y educadoras de todo el mundo que he podido conocer aquí, que deciden desplazarse a otros lugares con el fin de tener una visión más amplia y poder mejorar a nivel profesional ofreciendo sus cualidades en otro país.
—Qué es lo que más echa de menos de casa?
—No hay duda. La familia, los amigos y amigas y el mar.
—Tiene intención de volver pronto o de momento no?
—Aunque el programa de Profesores Visitants del Ministeri de l'Interior facilita la estancia por un máximo de cinco años, de momento tengo previsto volver a Tarragona al acabar este curso escolar.