Sucesos
El cauce del Francolí continúa sucio a las puertas de una nueva gota fría
En la desembocadura están los restos de un coche arrastrado por el agua y una gran cantidad de cañas mientras el AEMET alerta de fuertes tormentas esta semana
Un coche arrastrado por la riada de octubre espera que lo retiren del Francolí
Los efectos de la riada del pasado 22 de octubre todavía son perfectamente visibles en el lecho del Francolí a su paso por la ciudad de Tarragona. Cinco semanas después de los fuertes aguaceros que causó grandes daños en varias comarcas y provocaron la muerte de cinco personas mientras que otros tres continúan desaparecidas, un coche convertido en chatarra, localidad al lado de unos de los puentes del trazado ferroviario, espera que la administración competente lo retire del lecho del río. El vehículo fue arrastrado por el agua hasta quedar parado justo delante del barrio de Residencial Palau.
El estado en que quedó el vehículo hace que sea complicado determinar la marca y el modelo sólo desde pocos metros de distancia. El coche es de color negro y está lleno de barro, cañas y ramas de árboles que no soportaron la fuerza del agua y que también fueron desplazadas por la riada.
Todo sigue igual
Grandes cantidades de demasiado arbórea se acumula en diferentes puntos del recorrido del río por Tarragona y, de manera muy especial, en las columnas de los puentes, tanto ferroviarios como viales, a pesar del tiempo pasado desde la última DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos). Los restos de la catástrofe también afectan a la zona del tramo final del río urbanizada, con caminos estropeados, papeleras fuera de su lugar, árboles caídos o la acumulación del suelo y demasiado vegetal en las rampas de acceso desde puntos como Torres Jordi y el Parc del Francolí.
La falta de limpieza del lecho puede convertirse en un obstáculo para el agua en caso de que se produzca una nueva riada a consecuencia de un clima cambiante. Precisamente, una DANA como la que provocó la catástrofe de octubre en las comarcas de Tarragona podría producirse en los próximos días. Aunque los meteorólogos tienen dudas a la hora de hacer la previsión para los próximos días, los pronósticos apuntan al hecho de que esta semana se inicia con un embossament de aire frío en la Península. La incertidumbre sobre la trayectoria de esta gota fría o DANA ofrece muchos interrogantes, pero los principales modelos meteorológicos globales que se usan en Europa (GFS, HRES-*IFS, ECMWF y UKMO) señalan escenarios diferentes.
Hoy por hoy, el modelo europeo prevé lluvias moderadas en el este y norte de la Península, con el grueso de la precipitación en el mar. Las lluvias podrían ser de cierta intensidad a las Baleares, nordeste de Cataluña y al norte de Alicante y sur de Valencia. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) emitió ayer una nota en la cual se señala que pueden producirse lluvias localmente fuertes en el Mediterráneo, aunque con una elevada incertidumbre en la previsión.
El pasado octubre, cuando se produjo la riada del Francolí, se esperaban fuertes lluvias, pero la realidad, por la gran cantidad de agua caída en un corto plazo de tiempo, sorprendió a todo el mundo y el resultado fue imprevisible y trágico.