La CUP condiciona la aprobación de los presupuestos al incremento de partidas sociales
El PSC afirma que no tomará una decisión hasta que no vea las cuentas
La CUP ha asegurado este jueves que no votará a favor de la aprobación de los presupuestos del 2020 del Ayuntamiento de Tarragona, si no se incorporan algunas de sus demandas. Los cupaires han lamentado que el equipo de gobierno todavía no les haya facilitado el contenido de las cuentas y han apuntado que no ha habido «un proceso de negociación real» con ERC y En Comú Podem (ECP). El PSC ha sido menos contundente y ha señalado que hasta que no puedan estudiar los presupuestos, no posicionarán. Para este viernes al mediodía hay prevista una comisión informativa en la que se decidirá si se aprueban inicialmente y si se pueden someter a votación del plenario. Un pleno que se celebraría, a priori, el 20 de diciembre.
La consejera de la CUP, Eva Miguel, ha indicado que «hay cuestiones viables y realistas» propuestas por la formación «que parece que no se tendrán en cuenta» por parte del gobierno municipal. La también consejera Laia Estrada ha hablado de que en los presupuestos no se da respuesta a algunas «líneas rojas» de los anticapitalistas. Ha citado incrementos de partidas en educación y casales municipales de verano, ayudas para la rehabilitación de viviendas para que se puedan destinar a alquiler social, en becas comedor o en el impulso de la lucha contra la corrupción.
Estrada ha comentado que han mantenido dos encuentros con el gobierno, pero que «no ha habido un proceso de negociación real». «Se nos explicó la filosofía de los nuevos presupuestos, pero no nos han dado el detalle ni como se encajan nuestras propuestas», ha concretado. Además, ha indicado que tiene la sensación que ya no hay tiempo para poder hacer cambios en las cuentas que el gobierno someterá a votación y que en las cuestiones que están de acuerdo es simplemente por «coincidencia» programática de las formaciones. Con todo, ha reconocido que «hay un grado de decepción importante por el hecho de que no haya estado la voluntad de trazar alianzas y trabajar conjuntamente». De todos modos, Estrada no ha cerrado la puerta a que la CUP se abstenga en la votación.
Las consejeras cupaires han dejado entrever que el gobierno de ERC y ECP ha trabajado como si tuvieran la mayoría garantizada y no con la voluntad de buscar un acuerdo. Una opinión compartida por la portavoz del PSC, Sandra Ramos. Los socialistas no han sido tan claros a la hora de pronunciarse con el sentido del voto. «Es un documento que no hemos visto, no nos podemos decidir», se ha limitado a decir Ramos. De todos modos se ha mostrado contraria a «subir impuestos», en referencia al aumento de la tasa de plusvalía por la venta de pisos que quiere impulsar al ejecutivo. Para nosotros el aumento de la plusvalía es para cuadrar presupuestos. Consideramos que es hacer trampa», ha señalado.
Tanto la CUP como el PSC han lamentado que poco más de 24 horas antes de la comisión informativa donde se tienen que debatir y aprobar inicialmente las cuentas, todavía no los han podido ver. Según han expresado, eso no les permitirá estudiarlos en profundidad.