La equiparación de derechos a los jardines de infancia de Tarragona puede afectar a las funcionarias

Las trabajadoras funcionarias de los Jardines de Infancia Municipales de Tarragona rechazaron la semana pasada una propuesta del Ayuntamiento que quería modificar el acuerdo de personal municipal al que pertenecen con el fin de equiparar los derechos que las subrogadas hace semanas que reivindican. En este acuerdo, las trabajadoras de la administración pública disfrutan de las mismas condiciones que el personal docente del Instituto Municipal de Educación de Tarragona (IMET). Según ha podido saber DiariMés, fue el sindicato quien las avisó de esta opción que el consistorio planteó en la mesa negociadora con las trabajadoras subrogadas y sin la presencia de las funcionarias, que creen que también tendrían que participar porque es un tema que las afecta. La modificación de este acuerdo se vería reflejada en una equiparación de horarios y de calendario, de manera que todas las trabajadoras de los jardines de infancia pasarían a hacer 37,5 horas semanales (las subrogadas hacen 38 y las funcionarias 35) y trabajarían también el mes de julio como hacen las que no forman parte del personal municipal. Al día de hoy, las funcionarias se rigen por el calendario de jardines de infancia de la Generalitat de Catalunya y trabajan hasta junio. La equiparación de los sueldos, con una diferencia de entre 400 y 500 euros más que cobran las funcionarias, no afectaría a esta modificación porque el gobierno ya ha destinado una partida en los presupuestos municipales del 2020 para pagar la diferencia salarial entre las trabajadoras desde el junio pasado, cuando el consistorio municipalizó 7 de los 9 jardines de infancia que todavía estaban en manos de empresas privadas. De todos modos, en las mesas negociadoras que han mantenido las directoras, maestros y educadoras subrogadas con el consistorio todavía no han quedado muy claras las propuestas del equipo de gobierno y el acuerdo entre las dos partes todavía no se ha materializado. Los sindicatos esperan un planteamiento más concreto y detallado porque no quedó muy clara la equiparación del calendario, en que el gobierno cree que tendría que estar en manos de la concejalía de Educación. Según explicó Núria Ibern, directora del Jardín de Infancia l'Arrabassada, no todos los centros tienen la misma demanda en el mes de julio, ya que una puede estar al 90% de ocupación mientras que otra puede tener sólo 4 o 5 niños o niñas. El problema entonces sería buscar una labor para todas las maestras que tendrían que trabajar todo julio quizás con pocos niños.