De Tarragona a Rennes
Sociedad
«La enseñanza universitaria es menos exigente que en España»
Maria Muntané Fiestas ha estudiado el primer semestre de cuarto de carrera a la Rennes School of Business, en Francia
Maria Muntané Fiestas es una tarraconense que ha estado durante los últimos cuatro meses estudiando un Erasmus en Rennes (Francia). Concretamente, ha hecho el primer trimestre del cuarto curso del grado en Negocios y Marketing Internacionales que estudia a ESCI-UPF de Barcelona en la Rennes School of Business.
—¿Cómo ha sido su trayectoria profesional hasta ahora?
—Realicé el bachillerato social para estudiar algo relacionado con los negocios y el marketing y al día de hoy estoy a cuarto curso del grado en Negocios y Marketing Internacional de ESCI-UPF en Barcelona. En abril de 2019 me marché a Mallorca a realizar las prácticas de la universidad hasta finales de agosto, un periodo de 5 meses, en Rapha, una empresa de ropa y complementos de ciclismo. Al volver de Mallorca deshice y volvía hacer las maletas, ya que me iba a Rennes a realizar un trimestre de mis estudios. Ahora, ya he vuelto a Tarragona después de haber sido casi nuevos meses fuera de casa.
—¿Qué motivos la llevaron a ir a Rennes?
—Desde que era pequeña siempre había querido marcharse fuera a estudiar, al menos unos meses para poder cambiar de aires y al mismo tiempo conocer gente y otras maneras de vivir. Además encuentro que es una forma sencilla y divertida de perfeccionar el inglés y aprender nuevos idiomas como en mi caso el francés.
—¿Cuál fue su primera impresión al llegar?
—La primera impresión al llegar a Rennes fue que los Bretones eran muy simpáticos y te ayudaban mucho, a lo que era contrario al estereotipo francés que te ponen en la cabeza antes de marcharse, eso es porque Rennes es una ciudad universitaria que está llena de extranjeros y estudiantes de todas partes. Otra cosa que me sorprendió fue el transporte público, ya que era una ciudad no muy grande y tenía una línea de metro que la recorría|recurría de lado a lado y que era muy útil y muy utilizada.
—¿Fue muy sorprendente el cambio o fue, más o menos, tal como se lo había imaginado?
—En sí el cambio no fue muy sorprendente, ya que soy una persona que se adapta rápido a los cambios, y además aunque no quieras porque te interesa aprender otros idiomas te acabas juntando con españoles lo que hace que tu día a día no sea tan diferente al de casa.
—¿Cuáles son las principales diferencias entre Rennes y Tarragona?
— Para mí la gran diferencia era la de horarios, las clases eran por la mañana hasta las 11 h., entonces comías y a las 13 h. empezabas las clases de la tarde. Las primeras semanas fue un poco difícil porque a las 11 de la mañana no tenía hambre como para comer, pero al cabo de las semanas te acostumbras, ya que no tienes otra opción. Lo mismo pasaba por cenar, ellos cenan a partir de las 18:30 horas hasta las 21 como máximo. Una tradición que a mí me encantó era ir al mercado de los sábados por la mañana, ponían en la plaza de la ciudad muchas paradas de fruta, verdura, pescado, queso... la tradición es ir, hacer la compra y además comprar un poco de queso, pan y embutido y sentarse en una terraza de algún bar o restaurante a comerlo mientras te tomas una copa de vino o de sidra, ya que la Bretaña se famosa por las manzanas.
—¿Cuáles son los lugares más característicos de su nueva ciudad de acogida?
—El mercado de los sábados es una de mis cosas preferidas. También la Rue de la Soif, calle de la Sed, que en realidad se llama Rue Saint Michel, es una calle llena de bares que a partir de las 19 h. están llenos de gente bebiendo y bailando. Pueblos y sitios que no te puedes perder si vas a Rennes, es Saint Malo, que es un pueblo costero precioso y también el conocido Monte Saint Michel. Son dos de los rincones más bonitos de la Bretaña.
—¿Qué destacaría de la manera de trabajar de Francia?
— En cuanto a la enseñanza universitaria, a mí me pareció que eran menos exigentes que en el estado español.
—¿Qué es lo que más echa de menos de casa?
—El sol y el calor ya que la Bretaña francesa es conocida por la lluvia, como mínimo llueve un poco cada día, y el placer de sentarse en una terraza a tomar una caña con el sol de cara no lo tienen. Otra cosa que he echado de menos es hacer deporte al aire libre, salir a correr o en bici es una de mis actividades preferidas en casa.
—¿Qué costumbre del país actual se llevaría hacia Cataluña?
—La de ir al mercado y, nada más salir, sentarse a tomar un poco de queso con pan recién comprado en una terraza al sol.
—¿Tiene intención de volver o de momento no?
—Mi intención ahora es acabar la carrera y estar en casa durante una temporada, si es que encuentro algún trabajo que se me interese, pero la verdad es que no estoy cerrada a nada y soy consciente de que puedo encontrar más trabajo fuera.