El 33 por ciento de la superficie del término municipal de Tarragona es forestal

El término municipal de Tarragona abarca un territorio de 1.960 hectáreas, de las cuales el 33 por ciento corresponden a superficie considerada forestal. Este dato consta en el informe elaborado por la empresa Limonium con el objetivo de determinar las franjas forestales, con la finalidad de prevenir incendios. De esta manera se hace efectiva una reclamación de la Generalitat para favorecer la seguridad en zonas afectadas próximas a espacios arborizados. El Ayuntamiento informó ayer de la aprobación definitiva de esta medida, así como de los diferentes planos del término municipales donde se indican los puntos más susceptibles de sufrir un incendio forestal y aquellos con un riesgo medio o inexistente.

La mayor parte de las zonas boscosas se concentran en el nordeste del término municipal, donde hay varias urbanizaciones, en las proximidades del Boscde la Marquesa y la Savinosa, y en el entorno de la conocida como Anella Verda.

Según indica el informe, el municipio presenta un alto riesgo de incendio forestal y está clasificado como tal por el Departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación de la Generalitat. En este contexto, el riesgo es bajo en el 61 por ciento del término municipal; alto en el 29 por ciento y muy alto en el 9 por ciento. Destaca, sobre todo, los bosques del litoral, con presencia de pinares mediterráneos, zonas arbustivas y barrancos, con fuerte presencia de núcleos habitados. El informe también detalla la localización las zonas de riesgo donde hay masías y casas aisladas.

Algunas franjas se tienen que crear

Aunque algunos núcleos habitados ya disponen de planes de autoprotección para emergencias por incendios forestales (PAU), integrados en el Plan de Actuación Municipal (PAM) de Tarragona, en algunas zonas se tendrán que llevar a cabo franjas de prevención. Las zonas potenciales más desarrolladas del municipio son los barrios de Sant Pere i Sant Pau, Sant Salvador i Sant Ramon, Mas del Frare y Mas Morató, las urbanizaciones Rodolat del Moro, Bosques de Tarragona, Cala Romana, Entrepins, el Escorpí, el Pinatell, la Móra y Cala Tamarit, y los núcleos de Monnars y Ferran.

La aprobación definitiva de las franjas de seguridad se produjo en el pleno municipal celebrado el pasado 22 de diciembre y llegó casi diez meses transcurridos desde que el Departamento de Interior de la Generalitat pidiera a los ayuntamientos del Tarragonès la incorporación de estos planos de delimitación de las urbanizaciones para prevenir incendios forestales y, también, poder actuar de manera inmediata en caso de que se detecte la aparición de un fuego.

El Ayuntamiento de Tarragona era uno de los que tenían el trabajo pendiente de hacer, aunque la empresa contratada para realizar el informe presentó sus conclusiones el mes de septiembre del 2018.

Los planos de delimitación son instrumentos que definen las fincas afectadas por los trabajos de limpieza que requieren las franjas perimetrales de 25 metros de anchura. El plano de delimitación fue aprobado inicialmente por el consejo plenario celebrado el 18 de marzo de los 2019, que fue remitido a la Dirección General de Ecosistemas Forestales y Gestión del Medio. El informe favorable se emitió el 25 de julio del 2019

El plano, donde se definen los espacios donde hay demasiado boscosa y los caminos de accesos a los espacios susceptibles de sufrir un incendio, tiene que ser poner a disposición de los diferentes cuerpos de emergencias para facilitar su actuación en caso de que sea necesario.