Fin de fiesta
La comparsa Colours Fantasy gana el Carnaval y Disco 45 queda segunda
El Rey Carnaval de este año y su Concubina pasan a mejor vida
La comparsa Colours Fantasy ha sido la ganadora de la edición de este año del Carnaval, que finalizó ayer martes. La segunda posición fue por Disco 45. El Toc de Quaresma de las campanas de la Catedral pusieron el punto final a esta propuesta lúdica, como clausura de una jornada presidida por el luto, las lágrimas de las lastimeras y el entierro del Rey Carnaval en un acto que contó con la participación de diablos, bestias, música y fuego.
Colours Fantasy, de la Granja, se hizo acreedor a organizar el sèquit del Rey Carnaval del 2021, año en que el Carnaval de Tarragona celebrará su cuadragésimo aniversario. La comparsa ganó el trofeo Ninot del Carnaval, además de la cuantía de 800 euros. El jurado decidió que el segundo lugar fuera para la comparsa Disc 45, de Sant Salvador, que recibió el trofeo Ninot del Carnaval y 500 euros, y será responsable del sèquit de la Reina. Así lo decidió el jurado formado por el programador artístico Kike Colmenar, la maquilladora Ariadna Fa, el diseñador Lluís Jiménez, la comunicadora audiovisual Laia Marín, la periodista Laia Poblado y la coreógrafa Teresa Sánchez.
El jurado concedió el premio honorífico Anécdota 2020 a la comparsa Marro Talent, para ser «la más simpática durante los actos del Carnaval y entretener al público durante la Rua de Lluïment» del pasado domingo. También fue reconocida con el premio Participación 2020 la comparsa La Ballaruga, para ser la que «asistió además actos» y «con más participantes», mientras que el premio Comparsa satírica 2020 recayó en La Bóta, para «hacer un uso alternativo de la pluma en su disfraz».
Rua de Lluïment del 2021
Anoche se dio el pistoletazo de salida del Carnaval del 2021, con la publicación del listado formado por las quince comparsas que participarán en la Rua de Lluïment de la cuadragésima edición. Por orden alfabético, las entidades premiadas fueron Amics de la Part Alta, Colours Fantasy, Associació de Veïns de l’Albada, Associació de Veïns Residencial Palau - Torres Jordi, Carmelites, Cayo Largo, Platinum, Cromatic Fusion, Disc 45, Nou Ritme, Aerodance, Fotem-li Canya, La Tàrraco de Luxe, Màgic Dansa y Spectrum.
Testamento y entierro
La política, el urbanismo, la red ferroviaria, la explosión en IQOXE e, incluso, el mundo de los castillos, el Nàstic y el Anfiteatro formaron parte del contenido que la Concubina incorporó en su testamento del vigésimosexto reinado. En la lectura, no faltaron referencias al hecho de que ninguna sirena sonara con motivo del accidente a la industria química del pasado 14 de enero, a la problemática surgida a raíz de la entrada en servicio del Corredor Mediterráneo o, como no podía ser de otra manera, a la epidemia de Coronavirus. Los políticos tampoco salieron demasiado bien parados. Sólo hay que ver el contenido del último párrafo del discurso: «Lego a los fachas malolientes, los de Vox y Ciutadans, el Congreso lleno de mierda, harto de antediluvianos». Si el final del testamento hace ser contundente, la Concubina también se mostró bastante expresiva en el primero. «Me ataca el coronavirus. No lloréis por mí, reinetas. Moriré este carnaval, ya se me han marchitado las tetas». Los barrios también tuvieron su momento. «La Part Alta se parece a una masía robar» o «la céntrica Rambla Nova se ha convertido en un agujero» fueron dos de los testigos. El testamento de la Concubina fue entregado a Lucifer, en el transcurso de un acto que contó con el apoyo del Colla La Bota, la Cobla de Llardons del Tecler, el Ball de Diables i els Diables Voramar, el Bou, la Víbria y el Griu, además de la Mascarada de Dol y los Cremallers.
Las últimas horas del Carnaval empezaron con la apertura de la casa mortuoria y el velatorio del féretro del Rey Carnaval en el Antiguo Ayuntamiento, y la concentración de las comparsas del luto en la plaza de las Cols. Finalizada la lectura del testamento en la plaza de la Fuente, fue el turno para proceder al definitivo entierro del Rey Carnaval y la crema del Ninot y la Ninota, mientras que la bota que los últimos días presidió la plaza más popular de Tarragona también acabó convirtiéndose en ceniza.