Patrimonio
Gloria dejó al descubierto una pedrera romana en la playa Larga
El espacio patrimonial se encontraba oculto por la arena, justo delante del edificio del restaurante Iot
La tormenta Glòria de finales del pasado mes de enero, que azotó gravemente el litoral del término municipal de Tarragona, dejó al descubierto una pedrera de época romana en la playa Larga, justodelante del edificio donde está el restaurante Iot. La estructura corresponde a la parte inferior de la pedrera y, en algunos sectores, se aprecian las marcas dejadas por los picapedres como resultado de los trabajos previos a la extracción de los sillares. El temporal marítimo se llevó grandes cantidades de arena de playa que cubría la base de la pedrera.
Jordi López, investigador del Institut Català d’Arqueologia Clàssica (ICAC), manifestó ayer miércoles en esta redacción que no había constancia de la existencia de la pedrera en este espacio conocido como la Porrassa, donde todavía se conservan diferentes cestos naturales. López comentó que «el edificio está soportado en la roca y, probablemente, debajo debe haber restos de la pedrera». En términos científicos, López apuntó que se trata «del negativo de la roca recortada».
El investigador del ICAC afirmó que el descubrimiento «es interesante» porque «supone un nuevo elemento que confirma que, en esta zona, había muchas pedreras». Lo más importante es la que es perfectamente visible en la Punta de la Creueta, en el extremo norte de la playa Larga, que llegaba hasta el mar, como seguramente sucedió con la localizada a pocos metros de distancia del Iot.
El hallazgo también ofrece información «de la orografía del litoral en la zona de la Porrassa», donde la existencia de cuevas permitió hacer noche a la comitiva del rey a Jaume I cuando regresó a Cataluña después de conquistar Mallorca, y antes de desplazarse a la ciudad de Tarragona en barco para desembarcar en el espacio que, a partir de aquel momento, es conocido como Punta del Miracle.
Hay que recordar que en 2018 se descubrió un embarcadero romano en la Roca Plana. Fue precisamente Jordi López quien investigó este lugar localizado, en línea recta, a pocos metros de distancia de la pedrera del Mèdol, la más importante de la ciudad de Tarraco y que alimentó de sillares para la construcción de los principales edificios de época romana. Existe la teoría que sillares del Mèdol llegaban a Tarraco por mar.
En el espacio que hay entre la punta de la Mora y Tarragona hay constancia de la existencia de varias pedreras romanas. De hecho, el temporal Glòria también desenterró sillares en la playa de la Savinosa.