La Ciutat de Repòs i Vacances será el décimo albergue tarraconense de la Xanascat

La Ciutat de Repòs i Vacances se convertirá en un complejo de turismo social y en albergue de juventud vinculado a la Xarxa Nacional d’Albergs Socials de Catalunya (Xanascat). El conseller de Treball, Afers Socials i Famílies, Chakir el Homrani, y el alcalde de Tarragona, Pau Ricomà, presentarán el viernes el contenido del proyecto de rehabilitación del complejo. Las obras permitirán disponer de un espacio único en la ciudad, con capacidad para 500 personas.

El futuro albergue se convertirá en el décimo de la Xanascat en las comarcas de Tarragona. Actualmente, están en funcionamiento los albergues de Aiguamurcia –a pocos metros de distancia de Santes Creus y de nombre Pere el Gran-, Hospitalet de l'Infant, Deltebre, Espluga de Francolí, Poblenou del Delta, Móra la Nova, Altafulla, Coma-ruga y Prat de Comte.

El proyecto prevé la cesión al Ayuntamiento del edificio donde estaba ubicada la antigua recepción y que es uno de los inmuebles que se pueden ver desde el exterior de la finca, en la N-340 y coincidiendo con uno de los accesos a la playa Larga. En el 2016, cuando ya se hablaba de la recuperación del complejo, el entonces alcalde de Tarragona, Josep Fèlix Ballesteros, propuso destinar uno de los edificios en Centro Cívico de Llevant.

Un nuevo futuro

Los albergues de la Xanascat están pensados para el turismo familiar y disponen de unas tarifas muy competitivas. Para este 2020, las que rigen en el establecimiento de Altafulla son de 17,20 euros al día en temporada baja y 22,70 euros en alta, para adultos de más de 30 años, y de 14,50 y 19,60 euros, respectivamente, para grupos. Además, hay diferentes descuentos y promociones. El desayuno tiene un precio de 3,50 euros, en temporada baja, y de 4,20 euros en el alta, mientras que una comida cuesta 8,50 euros o 10 euros, según la temporada, y dos 15,40 euros y 18 euros, si es para grupos o para adultos. La Xanascat se dirige a todas aquellas familias con hijos menores de 18 años.

Las instalaciones, obra de los arquitectos tarraconenses Antoni Pujol y Josep Maria Monravà, fueron inauguradas en julio de 1957, convirtiéndose en las primeras de sus características en el Estado español. Propiedad de la Obra de Educación y Descanso, los 140.000 metros cuadrados que ocupaba la entonces conocida como en Ciudad Residencial fue transferida a la Generalitat en 1980. En 1983 reabrió, después de llevar a cabo obras de mejor por un importe 600.000 euros. Los destinatarios eran familias vinculadas a los sindicatos, en función de una serie de porcentajes. Los que más usuarios aportaban eran UGT y Comisiones Obreras.

En diciembre del 2011 la Generalitat decidió cerrar la Ciutat de Repòs i Vacances, iniciándose un progresivo deterioro de las diferentes construcciones y la práctica destrucción de muchos de los chalets que, años antes, habían sido utilizados por personas que venían a Tarragona a pasar unos días de vacaciones cerca del mar.

El pasado más de enero, el grupo municipal de Junts per Tarragona presentó al plenario una moción que proponía la reapertura de la instalación «cuanto antes mejor» y la redacción de un proyecto con el fin de recuperarla. La moción prosperó con los votos afirmativos de todas las formaciones políticas representadas en el Ayuntamiento.